Los últimos 88 militares españoles que permanecían desplegados en Kosovo dentro del contingente de la OTAN llegaron ayer sábado a Madrid, poniendo fin a una misión de una década en los Balcanes.
La ministra de Defensa de España, Carme Chacón, recibió a los soldados en la base aérea de Getafe junto a su predecesor Eduardo Serra, quien estuvo en 1999 al inicio de un despliegue militar en el que participaron 22 mil efectivos.
La ministra anunció el repliegue sorpresivamente en marzo, desatando las críticas de los aliados de la OTAN, que se quejaron de que la decisión fue tomada de forma unilateral.
Kosovo, cuya población es de mayoría albanesa, declaró unilateralmente su independencia en febrero de 2008. Desde entonces ha sido reconocido por 22 de los 27 miembros de la Unión Europea, todos salvo España, Chipre, Grecia, Eslovaquia y Rumania.
