TIFLIS, Georgia (EFE). Rusia no conseguirá poner a Georgia de rodillas, aseveró ayer el presidente georgiano, Eduard Shevardnadze, tras volver a rechazar las aspiraciones de Moscú de invadir el desfiladero georgiano de Pankisi, base de la guerrilla chechén.
En una conferencia de su movimiento político, Unión de Ciudadanos de Georgia, el ex ministro de Exteriores del presidente soviético, Mijail Gorbachov, contrapuso a las presiones rusas la nueva amistad de su país con Estados Unidos y Occidente.
Algunos (en Moscú) todavía no se han hecho a la idea de que lo dicho en el centro de su país nunca será ley para Georgia, dijo Shevardnadze, en alusión a la masiva campaña de propaganda desatada en los medios rusos contra Georgia y él mismo.
El presidente de Georgia, quien había prometido que dentro de cinco años su país pedirá el ingreso en la Alianza Atlántica, resaltó la ayuda militar ofrecida de EU a su país para armar y adiestrar al Ejército georgiano y afirmó que esto significa que no solo Rusia, sino también Estados Unidos, la Unión Europea y la OTAN tienen intereses estratégicos en la zona del Cáucaso.
Rusia sostiene que Georgia no podrá resolver por sí sola los problemas de Pankisi y exige que la inviten para poner allí orden, dijo el presidente de la ex república soviética.
Pero en Georgia sabemos muy bien lo que significa la presencia de un Ejército ajeno en nuestro territorio, enfatizó, en alusión a la masiva ayuda militar de Moscú a los separatistas pro-rusos de la región georgiana de Abjasia en su guerra de secesión de 1992-1993.
El Kremlin, incapaz de acabar la guerra de Chechenia, denuncia la presencia en Pankisi de guerrilleros y terroristas internacionales y acusa a las tropas georgianas de empujar hacia Rusia a los grupos rebeldes que el ejército ruso forzó a entrar en Georgia.
Recientemente Georgia acusó a Rusia en la ONU de terrorismo de estado por reiteradas incursiones aéreas y bombardeo de aldeas en Pankisi, con la muerte de al menos una persona. Moscú lo negó, pero fueron confirmados por observadores internacionales.
El presidente ruso, Vladímir Putin, en un mensaje a Shevardnadze esta semana, criticó la operación policial en Pankisi y presionó a Tiflis para que acepte la participación del Ejército ruso, aunque admitió que el asunto es competencia exclusiva de Georgia.
El mandatario georgiano comentó que personalmente tiene relaciones muy normales con Putin y otros políticos rusos, pero no con todos.
Mientras yo sea presidente, nadie pondrá a Georgia de rodillas, aseveró el presidente georgiano.