El presidente Hugo Chávez asumió ayer un nuevo mandato de seis años con la promesa de transformar Venezuela en un Estado socialista mediante reformas radicales que "nada ni nadie podrá impedir".
El militar retirado, que ganó la reelección en diciembre con una contundente mayoría, sacudió al país y a los mercados con su reciente anuncio de que nacionalizará sectores estratégicos de la economía y que pedirá al Congreso poderes especiales para promulgar "leyes revolucionarias" por decreto.
"Juro por mi patria que no daré descanso a mi brazo, ni reposo a mi alma, que entregaré mis días y mis noches y mi vida entera en la construcción del socialismo venezolano, en la construcción de un nuevo sistema político, un nuevo sistema social, nuevo sistema económico", dijo Chávez.
"Patria, socialismo o muerte, lo juro", concluyó en un modesto acto de juramentación celebrado en la Asamblea Nacional sin la presencia de mandatarios extranjeros.
En su discurso, Chávez esbozó las líneas maestras para su nuevo sexenio que incluirán una ley que le dé poder para acometer reformas legislativas de gran calado en materia económica y social, así como una nueva reforma a la Constitución que él mismo cambió tras llegar al poder en 1999.
La educación "en todos los espacios" de la sociedad, una nueva distribución del poder y una "explosión" de la capacidad de decisión de las comunidades completan lo que Chávez denominó como los "cinco nuevos motores constituyentes" para lograr el objetivo de un país socialista.
"El pueblo votó por la vía del socialismo y es socialismo lo que quiere el pueblo, y es socialismo lo que requiere el pueblo, lo que necesita la patria", dijo el ex paracaidista, que saltó a la fama en 1992 con un frustrado golpe de Estado contra el ex presidente Carlos Andrés Pérez.
Incertidumbre económica
Los planes de Chávez -con los que dice buscar una sociedad más justa y equitativa- generaron incertidumbre sobre el futuro económico del país petrolero y provocaron que el martes se desplomara el mercado local de valores, los bonos soberanos y se disparara el tipo de cambio no oficial.
"La Bolsa de Caracas podrá caer, lo que no va a caer es Venezuela, es la economía venezolana, más pujante que nunca antes", dijo Chávez, quien afirmó que se está "jugando al alarmismo" con sus anuncios sobre la estatización de empresas clave en los sectores de telecomunicaciones y electricidad.
reforma Constitucional
Chávez instó a actuar con "urgencia" para realizar una reforma "integral y profunda" de la Carta Magna. Entre los puntos que el mandatario ha adelantado que modificará en el texto están suprimir la autonomía del Banco Central de Venezuela -una característica "nefasta propia del neoliberalismo"- y eliminar los límites a la reelección presidencial.
Además quiere promover un mayor control sobre el sector energético con la modificación de artículos que permiten la mayoría accionaria de firmas extranjeras en el sector petrolero y gasífero en Venezuela, uno de los mayores exportadores mundiales de crudo y un peso pesado de la OPEP.
El ex teniente coronel, nacido en julio de 1954 en el seno de una familia humilde de los llanos venezolanos, es acusado por sus detractores como "un dictador en ciernes".

