Los tripulantes del carguero con bandera irlandesa Rachel Corrie rechazaron ayer la oferta de Israel de atracar en el puerto de Ashdod y depositar allí la ayuda humanitaria que llevan a la franja de Gaza, y continúan rumbo a la región pese a la amenaza de Israel de que mantendrá el bloqueo.
Solo unos días después del asalto israelí a una flotilla solidaria a la franja de Gaza que dejó nueve muertos, los organizadores señalaron que se espera una segunda confrontación. “Nunca iremos al puerto israelí, de no ser por la fuerza”, dijo Mary Hughes, una portavoz de Free Gaza, a DPA.
La cofundadora de la organización Free Gaza, Greta Berlin, aseguró desde el puerto chipriota de Larnica que el barco con ayuda humanitaria para la población palestina continúa su curso con unos 20 activistas a bordo, entre ellos la Nobel de la Paz irlandesa Mairead Maguir y el ex subsecretario general de la ONU Denis Halliday. El Rachel Corrie transporta un cargamento de unas mil 200 toneladas, que incluye 560 toneladas de cemento, así como 100 toneladas de equipo médico y unas 200 sillas de ruedas eléctricas y normales.

