La muerte del senador Edward Kennedy marca el ocaso de una de las familias políticas más relevantes de EU, ya que ninguno de los herederos parece reunir la mezcla de carisma, ambición y celebridad característica del grupo.
“No parece haber nadie que tome la antorcha”, dijo Thomas Whalen, un profesor de política en la Universidad de Boston. “En la nueva generación no parece haber nadie que continúe con el legado. Puede que Ted Kennedy haya sido el último”, comentó Whalen, autor de un libro sobre la primera postulación de John Kennedy al Senado en 1952.
Muchos de los Kennedy jóvenes participan en la vida política y cívica del país pero ninguno con el alcance de Ted Kennedy.
Kennedy era el último de los cuatro hermanos varones de la familia, que incluía a John, elegido presidente en 1960 y asesinado en 1963, además de a Robert, un senador por Nueva York cuyo intento por ganar la candidatura presidencial terminó con su asesinato en 1968. El hermano mayor, Joseph Jr., murió durante la Segunda Guerra Mundial.
El sobrino de Ted Kennedy, Joseph, el hijo mayor de Robert, es usualmente nombrado como una posibilidad. Joseph fue congresista por Massachusetts durante seis períodos y ahora dirige la organización sin fines de lucro Citizens Energy Corp, que entrega gasoil de calefacción barato para los pobres.
Consideró postularse para el puesto de gobernador de Massachusetts en varias ocasiones pero nunca lo hizo.
En 1997, su ex esposa publicó un libro para nada positivo sobre el político del clan Kennedy.
Los demócratas, conscientes del afecto de la gente por la familia Kennedy, podrían pedirle al ex congresista, de 56 años, que aspire al asiento de su tío.
Otros Kennedy podrían mantener vivo el legado, pero ninguno con la proporción del canoso “León del Senado”, uno de los congresistas y comunicadores más eficientes de Washington.
Otro que se piensa podría seguir la tradición es Patrick Kennedy, hijo de Ted y representante por el estado de Rhode Island. Patrick, de 42 años de edad, deberá mudarse a Massachusetts si quiere lograr la banca de su padre.
Pero Patrick también ha estado envuelto en controversias. La más reciente, ocurrida en 2006, cuando buscó ayuda por su dependencia de medicamentos recetados luego de estrellar su automóvil . Este año sufrió una recaída en su batalla contra la adicción.

