La falta de fondos en las arcas estatales ha frenado la carrera armamentista mundial, según el Instituto Internacional de Investigaciones para la Paz de Estocolmo (Sipri), que señala en su informe anual que en 2010 los gastos en defensa aumentaron solamente 1.3% con respecto a 2009.
Desde los atentados del 11 de septiembre de 2011 en Estados Unidos, el crecimiento había sido de 5.1%, según Sipri.
El instituto cifró los gastos generales en 2010 en 1.63 billones de dólares (1.1 billón de euros).
El mayor aumento se dio en Latinoamérica, con 5.8% más de gastos, hasta un total de 63 mil 300 millones de dólares. De 2001 a 2009 el aumento fue de 3.7%.
Carina Solmirano, experta del Sipri para la región, consideró que el aumento “es sorprendente en vista de que no hay amenazas militares en la mayoría de los países, que además tienen muchos problemas sociales urgentes”. “Una parte de la explicación —añadió— es que la región vive un buen momento económico en contraste con otras partes del mundo, con 6% de crecimiento estimado en 2010. Sin embargo, la principal razón es geopolítica, según el Sipri.
Brasil, el país que más aumentó sus gastos (9.3%), invirtió 2 mil 400 millones de los 3 mil millones de dólares de aumento regional en términos reales.
Perú también ha aumentado su gasto en los esfuerzos por combatir el resurgimiento de Sendero Luminoso. En total los incrementó 16% a 2 mil 150 millones de dólares. En el caso de Venezuela hubo un retroceso, a diferencia del resto, de 27.3% en 2010 frente a 2009, y el nivel se mantiene algo por debajo del de 2001 en términos reales, si bien el país sigue comprando armas a su principal proveedor, Rusia.
Como en años anteriores, el Sipri alerta del peligro de una carrera armamentista en el subcontinente, aunque espera que Chile, el principal importador de armas de la región, reduzca sus compras en los próximos años tras la abolición de una ley que entregaba 10% de los ingresos del cobre a las Fuerzas Armadas para la compra de equipo.
En Europa los gastos militares se redujeron en 2.8%, mientras que en África aumentaron 5.2%, principalmente en Argelia, Angola y Nigeria.
Estados Unidos, con un total de 698 mil millones de dólares, continúa como el país que más gasta, cinco veces más que su inmediato seguidor, China, con 119 mil millones de dólares.