La masacre de la escuela de Río de Janeiro fue perpetrada por dos revólveres comprados en forma ilegal, que forman parte de los 8 millones de armas de fuego clandestinas que circulan en el mercado de la violencia de Brasil.
Wellington Menezes de Oliveira, autor de la masacre en una escuela de Río de Janeiro, compró por 165 dólares en forma ilegal uno de los revólveres que usó para matar a 12 niños, el jueves pasado, para después suicidarse. La policía de Río de Janeiro informó que dos personas fueron detenidas acusadas de intermediar la venta del revólver a Wellington Menezes de Oliveira, de 23 años, que el jueves ingresó a su ex colegio y a sangre fría caminó matando alumnos en su camino, informó la cadena Globo.
Un cerrajero llamado Charleston Souza y su colega Isaías de Souza fueron detenidos y declararon que cobraron 20 dólares cada uno para intermediar la compra del arma, un revólver 32 que había sido robado de una casa de campo en 1994.
