Un suicida atacó el jueves a un convoy estadounidense con un coche bomba que detonó a unos 200 metros (yardas) de la embajada de Estados Unidos en Kabul, y mató a cuatro civiles afganos cuando entraban personas a la misión para celebrar el Día de Acción de Gracias.
Al menos 18 personas fueron heridas por el ataque perpetrado a las 8:30 a.m., informó un vocero del ministerio de Salud, Abdula Fahim.
El policía Abdul Manan dijo que la explosión fue provocada por un suicida a bordo de un automóvil.
Ningún empleado o funcionario de la embajada resultó lesionado o muerto por el estallido, dijo la legación diplomática en un comunicado.
El atentado ocurrió en el último día de la visita de una delegación del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. La ONU había advertido a su personal en Afganistán de posibles ataques terroristas durante la visita.
Los empleados de la sede habían organizado una carrera atlética dentro del amplio recinto, ya que la embajada no permite a su personal abandonar el predio de Kabul, por lo que el personal organiza con frecuencia eventos deportivos y otros festejos, e invita a los norteamericanos afincados en la capital afgana.

