Londres (DPA). Desde hace más de 70 años, John Mills es un emblema del cine británico y, a pesar de su edad, aún no está a la vista el fin de su carrera.
El actor, que mañana sábado cumple 95 años, acaba de rodar su película número 126. La cinta, Bright Young Thing, basada en una novela de Evelyn Waugh, llegará próximamente a los cines.
En 1932, el actor, nacido en Felixstowe, en el condado de Suffolk, como hijo de un profesor de matemáticas, apareció por primera vez en la gran pantalla en la película The Midshipmaid.
A fines de los años 30 y en los 40, Mills se dio a conocer sobre todo como el prototipo del oficial británico honorable y voluntarioso. Los films We Dive at Dawn y In Which We Serve surgieron en esa época.
En el rodaje de In Which We Serve, Mills se encontró por primera vez con David Lean como codirector. Con él desarrolló luego una larga y fructífera cooperación.
Lean contrató a Mills en 1946 para la adaptación de la novela de Dickens de Great Expectations. La película, en la que encarna a un amante sin recursos, amplió su registro, y figura según sus propias declaraciones entre sus preferidas.
Luego, se le abrió el camino para papeles de carácter como el del veterano de guerra desilusionado en The October Man (1947).
Con dirección de Lean, Mills rodó en 1954 Hobson's Choice y más adelante Ryan's Daughter (1970). Por su impactante actuación de un anciano loco en esa cinta fue distinguido con un Oscar al mejor actor de reparto.
De la época más reciente, las películas más conocidas de Mills son Who's That Girl (1987) con Madonna, Hamlet (1997), de Kenneth Branagh, y Cats: The Musical (1988).
