MEXICO, DF. (EFE). La cantante mexicana Alejandra Guzmán se mostró ayer satisfecha con la decisión de su novio, Gerardo Gómez Borbolla, quien ha iniciado una rehabilitación para superar su adicción a las drogas.
No obstante, la artista eludió dar más detalles en relación con esa circunstancia o con su vida privada a pesar de la insistencia de la prensa.
Yo ya estoy harta de que se hable de mi vida y si me caso o no me caso, ¡pues no!... Yo en este momento lo que vengo es a hablar de mi música, del concierto. Estoy preocupada por mí, por las canciones del nuevo disco y lo demás ya dirá Dios, declaró.
Lo que haga de mi vida, qué les importa, si ando o no ando con Gerardo... Ya estoy harta de hablar de mi relación y si se fue al (centro de rehabilitación de) Oceánica fue su decisión, es una que yo le aplaudo porque hace mucho tiempo también fui, afirmó la cantante.
Entre sus planes artísticos mencionó que el próximo 22 de agosto actuará junto a su padre, Enrique Guzmán, en el Auditorio Nacional, por lo que este miércoles realizaron una conferencia de prensa para informar al respecto.
La cantante reconoció que la relación que mantiene con la prensa jamás ha sido de lo mejor.