Está demostrado que cerca del 80% de los accidentes los sufren las amas de casa mientras realizan tareas domésticas. Quemaduras de aceite en la cocina o de vapor con la plancha o cortes con el exprimidor de zumos son algunos de los casos comunes que se producen en numerosos hogares todos los días. Los pequeños electrodomésticos suelen ser los responsables de muchos de estos accidentes caseros.
Algunas de estas incidencias cotidianas y desagradables podrían evitarse si los electrodomésticos salieran de fábrica con unos sistemas de seguridad apropiados y precisamente eso es lo que buscan los fabricantes con los nuevos modelos lanzados al mercado.
Los electrodomésticos de nueva generación tienen una característica común: además de ser rápidos, seguros y pequeñísimos, son estéticamente muy decorativos, ya que están diseñados con llamativos colores.
Podemos ver las nuevas planchas a vapor, las cafeteras de goteo, las freidoras o exprimidores, así como el horno microondas, de dimensiones diminutas y colores vivos. Las tareas del hogar se hacen así más cómodas, fáciles y rápidas.
También se puede contar con un microordenador que puede ser conectado a un monitor: el slot computers, que incorpora un potente microprocesador Intel Pentium III a mil megaherzios, que permite conexión a internet y que lo convierte en el pequeño cerebro indispensable de la casa.
Según los padres de la criatura, estos ordenadores son la perfecta herramienta de trabajo para quienes han modernizado el hogar, así como para organizar la casa incluso desde lejos, ya que su reducido tamaño y ligereza lo convierte en idóneo para programar múltiples funciones, aún sin estar en la propia vivienda.
Pero donde realmente se han roto todos los moldes es en el campo de los pequeños electrodomésticos tradicionales, los de uso cotidiano y frecuente, como pueden ser la plancha, los abrelatas, exprimidores, microondas o vitrocerámicas.
Las nuevas freidoras de tres litros de capacidad son uno de los modelos más seguros y eficaces del mercado, ya que poseen un módulo extraíble con resistencia sumergida, de manera que, al separar el conjunto panel de mandos/resistencia del resto de la freidora, esta queda totalmente sin corriente eléctrica.
De esta forma, su manipulación, desmontaje y limpieza resultan seguros y cómodos. Por otra parte, el calor se mantiene en el interior mientras que las paredes permanecen frías, con lo cual se minimiza el riesgo de quemaduras. La tapa tiene un cierre de seguridad para evitar salpicaduras y un visor de gran tamaño que permite controlar el proceso de fritura sin necesidad de abrir.
El asa integrada con elevación automática del cestillo posibilita escurrir el aceite con la tapa cerrada y, por si todo esto fuera poco, el sistema de zona fría impide la transmisión de sabores al freír, ya que en la parte inferior de la cubeta se depositan los restos de fritura sin llegar a quemarse, de forma que el aceite se conserva limpio más tiempo, con lo cual también se ahorra aceite. Además, la tapa de esta freidora integra filtro antigrasa que reduce los olores mientras se cocina y el recoge-cables, que facilita que el aparato pueda guardarse. También posee un selector continuo de temperatura que permite graduarla, adaptándola a los alimentos que se van a cocinar. En cuanto al exprimidor Porsche Design de Siemens, es un electrodoméstico que no sólo destaca por su estudiado diseño en aluminio mate, sino también por sus grandes prestaciones. Este nuevo modelo de exprimidor funciona con 100W de potencia e incorpora un cono giratorio con las estrías dispuestas en espiral para obtener más cantidad de zumo que el resto de exprimidores convencionales sin el menor riesgo.
La nueva encimera vitrocerámica presenta un elegante marco biselado y sustituye los mandos tradicionales por el sistema touch control frontal, que incorpora programador de cocinado.

