Temístocles Díaz Strunz Cuando se presentó la posibilidad del nombramiento del profesor Jované como director de la CSS, dejé bien clara mi posición de que sería un grave error muy costoso para el país. Así lo hice saber a todos con los que conversaba e incluso traté -aunque sin mucho éxito- de influir para que este no se diera. En ese momento yo no tenía mucha autoridad política, ya que había apoyado al Ing. Alberto Vallarino. Durante cuatro años, la administración de la CSS se dedicó sistemáticamente a planificar el caos con el nombramiento de toda una estructura izquierdista de varias miles de personas, aunque las necesidades reales no sustentan dichas acciones. Comenzó con una CSS en superávit de aproximadamente 200 millones y ha quedado en déficit.
Engaño sistemático
28 sep 2003 - 05:00 AM
