GIONELA JORDAN V. y NUBIA APARICIO S. planas@prensa.com
El accidente ocurrido en el Instituto Oncológico Nacional (ION) -en el que 28 enfermos con cáncer pélvico recibieron una sobredosis de radiación- es único en el mundo, porque solo hay registros de sobreexposición a radiación de 30% a 50%, lo que ha provocado mortalidad.
Sin embargo, en el caso del ION hubo niveles que oscilan entre el 50% y 100% por encima de la dosis prescrita y todas las exposiciones se llevaron a cabo en el área de la pelvis.
Así se desprende del informe elaborado por expertos de la Organización Internacional de Energía Atómica (IAEA), a solicitud de las autoridades médicas nacionales tras detectarse el hallazgo, y a cuyo documento tuvo acceso La Prensa.
En este documento los expertos de la IAEA precisaron que el caso de energía atómica en Panamá fue muy serio, ya que ha habido muchos pacientes con marcados efectos de radiación debido a la sobreexposición y que tanto la morbilidad como la mortalidad han aumentado.
Hasta el momento de completarse este informe había fallecido un total de ocho de los 28 pacientes afectados con las descargas de radiación. En la actualidad, a ese listado se le deben sumar tres casos más reportados por las autoridades médicas. Las nuevas víctimas son Margarita Sevillano, Agustina Ríos y Camila Pinto.
La lista de fallecidos al momento de levantarse este informe son: Walter Chandler, Christina Martínez, Josefina Bellido, Victoria Avilés, Nicolasa Guevara, Rosa Abrego Sánchez, Otilia Tuñón y Rupertina Herrera Alonso.
De estos ocho, el informe señala que el deceso de Chandler, Martínez y Bellido estaba relacionado con la sobrerradiación, en tanto que respecto a Avilés y Guevara, señala que probablemente.
Sobre las muertes de Abrego Sánchez y Tuñón, el estudio señala que no hay suficientes datos para llegar a una conclusión, y respecto a la muerte de Herrera Alonso precisa que el deceso seguramente está relacionado con el cáncer que padecía.
Los pacientes que murieron como resultado de la sobredosis de radiación o quienes han presentado complicaciones severas -destaca el informe- son consistentes con la información científica. El documento indica que en la mayoría de los casos, tanto la dosis total como la dosis por fracción es más alta de la que se sabe que provoca las complicaciones observadas en estos pacientes.
También precisa que los sobrevivientes presentan serios problemas rectales, intestinales -estrechez, sangrado y diarrea-, y todavía siguen en alto riesgo.
Los científicos también concluyeron que los efectos adicionales por la radiación se manifestarán durante los próximos meses o años, y por los niveles de dosis aplicados debe esperarse un aumento de la mortalidad y morbilidad.
Además, señalan que la mayoría de los sobrevivientes tienen serios problemas médicos en estos momentos, relacionados principalmente con afecciones intestinales y de vejiga. Al respecto, concluyeron que los pacientes no se curarán de estos padecimientos y que estos males probablemente progresen en la mayoría de los casos.
Según el informe, en este accidente hay un amplio espectro de cuánta sobreexposición ocurrió realmente. Los protocolos de radioterapia curativa normalmente abarcan entre 20 y 25 tratamientos.
Pero en este accidente, mientras algunos pacientes no pudieron tolerar el tratamiento, la mayoría lo recibió completo. En estos últimos, la afección fue mayor, debido a que fueron expuestos a una radiación del 100% de la dosis.
De acuerdo con los expertos del Instituto Internacional de Energía Atómica, el accidente se produjo cuando la computadora -debido a datos erróneos introducidos por físicos- calculó más horas de radiación de las que correspondía a cada paciente en su tratamiento rutinario.
Esta situación -indicaron- provocó que se depositara demasiada energía tanto en los tejidos normales como en el tumor, y esa sobreexposición resultó en una muerte excesiva de células, además de que dañó tejidos y vasos sanguíneos.
Advirtieron que además de la metodología de cálculo incorrecta empleada por un médico, aparentemente los tecnólogos no se percataron de que en pacientes con tratamientos y enfermedades similares, la duración del tratamiento era para algunos el doble que para los otros.
Según el informe, en algunos de los 28 casos aparecieron reacciones severas prematuras que provocaron la suspensión o cancelación del tratamiento, y advierte que no fue sino hasta que hubo varios de estos casos y algunas muertes que se logró determinar la causa.
El documento precisa que las complicaciones graves de los casos se observan cuando la dosis biológicamente efectiva (BED siglas en inglés) excede los 65-70 Gy (medida de radiación que se usa para combatir el tumor de acuerdo con su tamaño y agresividad).
El pasado 18 de mayo, el Ministerio de Salud anunció a la ciudadanía que entre agosto de 2000 y marzo del 2001, el servicio de radioterapia del ION había administrado por error una sobredosis de radiación a 28 pacientes.
A partir de esa fecha, la institución de salud ordenó una investigación del accidente para establecer exactamente por qué pasó y así determinar las responsabilidades.
Luego de más de dos meses de investigaciones, las cuales involucraron análisis de informes realizados por expertos nacionales e internacionales, entrevistas a personal médico, peritos, familiares de pacientes y autoridades médicas, el Consejo Técnico de Salud resolvió sancionar a 11 funcionarios del Departamento de Radioterapia del ION.
La comisión de expertos del Instituto Internacional de Energía Atómica estuvo integrada por Pedro Ortiz López, Fred Mettler, del Departamento de Radiología de la Universidad de Nuevo México (Estados Unidos), y Jean-Marc Cosset, del Departamento de Radioterapia del Instituto Curie (Francia).
Asimismo por Makoto Akashi, del Instituto Nacional de Ciencias Radiológicas de Japón, y Stanislav Vatnifsky, jefe de Dosimetría y Radiación Médica de la IAEA.
La investigación que llevaron a cabo incluyó una revisión de todo el equipo de tratamiento, una auditoría médica exhaustiva en el ION, además de exámenes a los pacientes con cáncer pélvico (colon, cuello uterino y próstata) que fueron expuestos a la sobredosis de radiación.
Hace unos días, el Ministerio Público ordenó hacer una indagatoria a tres funcionarios del ION, a quienes se les formuló cargos penales por negligencia en el desempeño de sus funciones, luego de una investigación de oficio iniciada por esta instancia judicial.
Se pudo conocer que tres técnicos del Departamento de Radioterapia serán indagados por la Fiscalía Superior Especial por su presunta responsabilidad en este caso.

