LOS ANGELES, Estados Unidos. Los estudios de Hollywood adelantaron las fechas de estreno de dos películas de guerra que hace un mes podrían haber sido consideradas inaceptables para los norteamericanos, después de los ataques contra las ciudades de Nueva York y Washington el pasado 11 de septiembre.
Twentieth Century Fox adelantó de enero al 30 de noviembre el debut de Behind Enemy Lines (Detrás de las líneas enemigas) y Columbia Pictures lanzará Black Hawk Down en diciembre, en lugar de esperar hasta marzo, como lo había programado originalmente.
Las fiestas de fin de año son la segunda temporada más rentable de los cines, después de la de verano, y también se caracteriza porque los estudios presentan sus candidatas al Oscar.
Aunque ejecutivos de ambos estudios afirmaron que no intentaban sacar provecho de los ataques del 11 de septiembre, no hay duda que la actual ola de patriotismo en Estados Unidos podría ser el factor preciso que ayude a los dos filmes a obtener altos ingresos de taquilla.
Yo creo que eso puede haber influenciado las calificaciones (para Behind Enemy Lines en las funciones de prueba) y hacer que al público le gustara la película un poco más, dijo Bruce Snyder, presidente de distribución nacional de Twentieth Century Fox.
La cinta es protagonizada por Owen Wilson como un piloto estadounidense que es derribado en territorio extranjero y debe ser rescatado por su oficial de comando (Gene Hackman) antes de que la policía secreta enemiga lo pueda encontrar.
La idea del filme surgió después que el piloto estadounidense Scott OGrady fue derribado sobre Bosnia.
Snyder dijo que el público de prueba le ha dado a la película una de las más altas calificaciones en la historia del estudio y la ha aplaudido de pie al final.
