WASHINGTON, EU. La nave espacial Galileo de la NASA llevó a cabo un controlado y ardiente choque contra Júpiter el domingo, poniendo así fin a 14 años de misión en los que logró importantes descubrimientos sobre el mayor planeta del sistema solar y sus lunas.
El Laboratorio de Propulsión de Naves de la Administración Nacional para la Aeronáutica y el Espacio (NASA), en Pasadena, California, recibió la última señal del aparato a las 1943 GMT, dijo el laboratorio en un comunicado.
Hemos aprendido algo asombroso. Esta misión ha valido su peso en oro, dijo la responsable del proyecto Galileo, Claudia Alexander.
Más de las mil personas que trabajaron en el programa Galileo se reunieron en el laboratorio para celebrar el final de la misión.
A Galileo apenas le quedaba carga de propulsión. Lanzado desde el transbordador espacial Atlantis en 1989, Galileo recorrió 4,600 millones de kilómetros antes de desintegrarse en la densa atmósfera de Júpiter el domingo.
Galileo orbitó Júpiter 34 veces y consiguió la primeras medidas directas de su atmósfera en 1995.
En aquella incursión se detectó la existencia de mares de agua salada subterránea en la luna de Júpiter llamada Europa.
