La grave e inmoral acusación de "antisemita" sí vale este comentario: para que yo sea antisemita tendría que ser anti-yo.
Por herencia de mi difunto padre (soñador y creador de Coronado), corre por mis venas orgullosa sangre judía, y siempre me he sentido judío a pesar de que practico la religión católica por herencia de mi querida madre.
Mi sangre judía es sangre brava y justa. Es la sangre de hombres y mujeres que saben lo que es sufrir al caer en los más profundos abismos humanos, para luego levantarse con un espíritu inquebrantado para luchar y construir nación... y a eso nos hemos dedicado, mi jovencito despistado. Usted hoy vive en libertad en este país, gracias a los sacrificios de muchos que como nosotros se arriesgaron en una lucha para liberarnos del yugo autocrático para que floreciera la democracia.
Además, permítame decirle que usted tiene buenos trabajos de construcción gracias a cuatro generaciones de nuestra familia que soñaron, se sacrificaron, construyeron sobre un sueño y lograron un proyecto llamado Coronado, en el que hay más de 5 mil propietarios que compraron confiando en que las zonificaciones y las leyes se harían respetar por el bien común de todos los propietarios y visitantes turísticos.
Porque por mis venas corre orgullosa sangre judía, actuamos siempre buscando justicia, aun cuando en ese caminar nos veamos en la penosa necesidad de denunciar a un cliente nuestro, como lo es usted y quienes lo contratan, si insiste en impunemente tomarse las playas que son bienes públicos inalienables, según la Constitución y la ley.
Porque por mis venas corre orgullosa sangre judía, rechazo y resiento que un judío sin vergüenza alguna pretenda arropar sus violaciones de la ley con huecas e inmorales acusaciones de "antisemitismo". Con el sufrimiento brutal de nuestros antepasados no se juega, jovencito, y mucho menos con el objeto de encubrir maleanterías. Cínico e inmoral es aquel que cree conocer el precio de todo, sin saber el valor de nada. Esto simplemente es intolerable para los judíos que sientan -como lo hacemos los de la familia Eisenmann- nuestra herencia con orgullo y honor.
Recapacite, joven despistado, y vuelva a la comunicación civilizada para arreglar con justicia el problema que solo usted ha creado. En vez de simplemente ganarse la vida, usted debería procurar crearse una vida. Además, usted también debería mostrar respeto por sus raíces familiares y frenar su arrogancia violadora de la ley, para hacer honor a su judaísmo.
