LA HAYA. Los holandeses hablan actualmente más de la familia real holandesa de lo que le gustaría a la reina Beatriz. La preocupación acerca del futuro de la dinastía de los Orange se debe a afirmaciones, rumores y desmentidos acerca del pasado de una candidata a sumarse a la familia.
Mabel Wisse Smit, de 35 años, prometida del príncipe Johan Friso, cayó bajo sospecha de haber tenido una relación con un conocido delincuente.
La alegre hija de banqueros, que el 24 de abril del año que viene se casará con el segundo hijo de la reina, negó esta afirmación. Admitió que conoció al narcotraficante hace unos 15 años durante un paseo en velero y que pasó la noche en la embarcación. Pero no tuvo ninguna relación con el delincuente, que fue abatido en 1991. La Corte le dio mayor peso a su desmentido a través de un comunicado oficial. Sin embargo, De Telegraaf determinó: La mayoría de los holandeses no le cree.
El hecho de que en el futuro exista la posibilidad de una reina Mabel con contactos con los bajos fondos es inconcebible para muchos holandeses.
Las acusaciones surgieron a partir del testimonio de un ex guardaespaldas del narcotraficante asesinado. En una entrevista televisiva, desató el escándalo hace una semana.