Harry Castro Stanziola revista@prensa.com
En lo que hoy es la República Checa y más precisamente Bohemia, una de sus regiones, siempre ha existido una muy pequeña aldea, cuya población ha sido de 2 mil 700 habitantes y que se conoce con el nombre de Jachimov. Esta queda muy cercana al estado alemán de Sajonia y por eso el idioma que en esta última región se habla ha tenido siempre gran influencia; inclusive hubo épocas en que la citada población estaba regida por gobiernos germanos.
En el año de 1516 los hombres de Jachimov descubrieron una importante mina de plata, algo que abunda en Bohemia.
El conde Hyeronmus Schlick, influyente persona del lugar, quedó convertido en el primer usufructuario de las minas recién descubiertas. El no se contentó con extraer la plata y venderla, sino que comenzó a fundirla para poder fabricar monedas (esto último sin poseer la debida autorización). Las llamó groschen .
El valle en donde está situada la población de Jachimov, se conoce con el nombre de Joachimsthal. Las monedas fueron entonces legalizadas y tuvieron muy largos nombres, algo frecuente en el idioma alemán, ya que se conocieron como Joachimsthalergulden o Joachimsthalergroschen .
Poco a poco el nombre se fue acortando hasta llegar a ser talergroschen primero y talers o thalers con posterioridad. Además, y como ya existían enormes cantidades, se fueron exportando a diversos países de Europa, quienes también las oficializaron.
De los 2 mil 700 primitivos habitantes, a causa del crecimiento de la población, la original aldea de Jachimov llegó a tener 18 mil habitantes.
La producción de monedas se inició (recuerden que estamos en el siglo XVI) con 250 mil thalers y llegó a ser de más de 5 millones de ellas, las cuales aumentaron a 12 a lo cual había que añadir las monedas de menor denominación.
Con el tiempo todos los países de la Europa y otros continentes usaron las citadas monedas y de allí el tallero italiano, el daler escandinavo, el daalder holandés, el dala del Hawai, el tala de Samoa, el etíope talari , y los que hoy nos interesa el dollar inglés.
En el siglo XVII existían en el mundo mil 500 tipos de thalers o monedas diferentes.
Se dice que la palabra dollar se introdujo en la lengua inglesa por Escocia. De allí a EU el paso era más fácil y corto. Sin embargo, y por un tiempo, Inglaterra había prohibido la exportación de metales y EU se tuvo que aprovisionar de ellas con unas que eran hechas con plata mexicana, región que en esas fechas era dominio español.
Estas llegaron a ser la divisa más aceptada en el mundo; sin embargo, en los países de habla española el real era el equivalente del dólar sajón.
Acerca del origen del signo "$" se atribuye a que la moneda española más común en las colonias inglesas se conocía como "el dólar de los pilares" y era que en un reverso de la moneda se veía representados a los dos hemisferios existentes, el oriental y el occidental cada uno como una gran columna (la de Hércules) de las cuales colgaba una especie de gran lienzo. De seguro que habrá otras versiones para explicar lo anterior.
Fue más tarde y ya en 1787 cuando Estados Unidos acuñó por primera vez sus monedas entre las cuales figuraron las de un centavo que siempre han sido de cobre o de aleaciones. Tenían una leyenda que traducida del inglés, quería decir: "ocúpate de tu negocio". También en ellos se podía leer "fugit" que significa "vuelo". Hoy debido al costo de la vida no solamente vuelen los centavos sino los dólares, quizás un poco ayudados por el hecho que son hechos de papel.
Estas historias han sido extraídas de diversas enciclopedias, pero existe un libro titulado La historia del dinero de Jack Weatherford, de la Editorial Andrés Bello de donde obtuvimos la mayoría de los datos.
