Un sol ardiente favoreció el donaire y la destreza de jóvenes estudiantes que rindieron un tributo al Primer Grito de Independencia que evocó la santeña Rufina Alfaro.
En ambos desfiles pudo apreciarse a ritmo de tambores, trompetas y liras el sentir patriótico ante tan significativa fiesta nacional; pero también se pudo disfrutar de alegres tonadas de tamboritos con sabor santeño.
En San Miguelito, luego de un pequeño acto protocolar, donde el legislador arnulfista Francisco Alemán, abanderado del día, hizo uso de la palabra, se inició el popular desfile de carretas que por más de una década organiza la Asociación de Santeños Residentes en San Miguelito.
El desfile se inició a las 10:00 a.m., en la sede de la Asociación, que sirvió de punto de encuentro de los políticos.
Tanto arnulfistas como perredistas participaron de los tamboritos, pero cada uno en su respectivo grupo. Martín Torrijos y Balbina Herrera caminaron un tramo del desfile acompañados de simpatizantes y copartidarios.
Mientras que a caballo iban los legisladores Marcos González y Francisco Ameglio, del Partido Arnulfista. Elpidio González, con su sombrero a la pedrá, decidió integrarse al grupo que acompañaba la carreta que él patrocinó.
Por toda la ruta de ambos desfiles se escuchó el rítmico sonar de los tambores, y se apreció el bamboleo de vistosas polleras que lucían las niñas.
En San Miguelito la nota discordante fue que el de una joven empollerada de la carreta de Seco Herrerano, que en vez de repartir pastillas o algún otro producto, tiraba pequeñas botellas llenas de licor. Los integrantes de uno de los conjuntos también hicieron algo similar.
Unas 13 carretas recorrieron las calles de San Miguelito hasta llegar a la Plaza Conquistador en donde continuaron las celebraciones con una tarde de mejorana.
El legislador Alemán recordó que los santeños son un motor importante de la economía nacional. Donde hay producción, ellos están allí, donde hay comercio ellos están allí. Son grandes trabajadores.
Alemán lamentó que por falta de empleo los santeños tengan que emigrar a la ciudad capital, donde tampoco encuentran oportunidades de trabajo.
El gobierno anterior tiró los aranceles a cero y sacrificó el agro. Nuestro gobierno está tratando de subir los aranceles y dándole un impulso a la reconversión, y a un sinnúmero de actividades para ayudar al interior de la República, dijo.
Con la celebración de esta fiesta, que se hace todos años en San Miguelito y en Juan Díaz, los santeños residentes en la ciudad logran un noble objetivo: rescatar de su pueblo, su cultura, sus costumbres y sus tradiciones.







