El proceso para crear un bonsai puede durar años, cuenta Constantino Tserotas, quien también es ex presidente de la Asociación Metropolitana de Bonsais y de la Asociación de Bonsais de Panamá.
El primer paso es seleccionar el material para hacer el árbol. La variedad puede ser mucha, y va desde árboles caídos de tamarindo, veraneras, ficus hasta chafleras; cualquier árbol con madera siempre y cuando la hoja no sea muy grande para guardar las proporciones, tomando en cuenta que la hoja se puede reducir a un tercio de su tamaño habitual.
Ayuda que la planta seleccionada tenga un vasto crecimiento de hojas pequeñas, ramitas gruesas y una corteza atractiva.
Luego viene el proceso de crear el vacío, la poda y el alambrado -después de decidir el estilo en que se quiere hacer el bonsai, basándose en los patrones pre-establecidos (clásico, cascada, doble tronco, bosque)-. El clásico es un bonsai triangular, con el ápice del árbol directamente sobre la base, y las ramas uniformemente distribuidas entre ambos lados.
La forma deseada se consigue enrollando la rama con alambre de aluminio en un ángulo de 45 grados, y así podemos torcer y doblar sin peligro de que se rompa", dice Tserotas. Se recomienda que el alambre sea 1/3 del espesor de la rama.
Luego sigue el proceso de meterlo en el pote y sus cuidados, como son el riego, los fertilizantes, el control de enfermedades y la poda continua para que no pierda la forma.

