Al momento de escribir esta nota, tres personas ya habían fallecido y alrededor de 10 mil habitantes de Ziketan y sus alrededores, una ciudad situada en la provincia noroccidental china de Qinghai, han sido declarados en cuarentena por la milicia y policía regional debido a un brote de peste neumónica. Nadie puede salir ni entrar desde la zona acordonada y, según las agencias de noticias, las autoridades sanitarias han emprendido una intensa cruzada de desinfección para erradicar a los agentes culpables del problema: los roedores, marmotas y una especie de perros salvajes. Asimismo, se ha recomendado a todos los ciudadanos que hayan visitado Ziketan desde mediados de julio que si presentan síntomas similares a la gripe o tienen fiebre deben ir al hospital para hacerse un examen.
No es para menos, pues la peste neumónica es una rarísima enfermedad infecciosa causada por el bacilo Yersinia pestis, que se transmite a los seres humanos y los animales a través de las picadas de sus garrapatas, pulgas o por inhalar en el aire el bacilo expulsado por el enfermo al toser o al contacto de las gotas de su tos.
La peste neumónica es la más mortífera de las tres variedades de pestes conocidas, pues se trata de una enfermedad que ataca a los pulmones y se desarrolla con gran rapidez –en sólo dos o tres días— por lo cual los pacientes tienen que ser atendidos en las primeras 24 a 48 horas de la aparición de los síntomas. Su virulencia se aproxima al 60% de los casos declarados.
Las otras dos pestes son la bubónica, cuya más connotada aparición cobró la vida de aproximadamente 25 millones de europeos durante la Edad Media, y la septicémica.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que cada año se producen de mil a 3 mil casos de peste bubónica en el planeta. El bacilo de Yersinia Pestis (que es el mismo que produce la variante neumónica) vive en los roedores silvestres de muchas regiones alrededor del mundo. Por ejemplo, hay focos endémicos permanentes en algunas áreas desérticas y/o montañosas de Asia, África, el oeste de Estados Unidos y en la América del Sur.
¿Qué hacer?
1- Si se sospecha haber contraído peste neumónica, lo primero es conseguir un diagnóstico médico, el cual se realiza a través de diferentes pruebas clínicas: tests de anticuerpos fluorescentes, serología, cultivos, etc.
2- Existe vacuna contra la peste. Se elabora con células enteras del Yersinia Pestis, pero no suele estar a la venta en casi ningún país, sino más bien se emplea para proteger al personal con alto riesgo de exposición al bacilo debido a que se trabaja en laboratorios de enfermedades infecto-contagiosas, en zonas agrícolas donde abundan los roedores de transmisión o para quienes frecuentan áreas de peligro endémico.
3- A quienes no están expuestos de manera directa y constante al contagio del bacilo, la mejor forma de evitarlo es tener en cuenta lo siguiente:
*Mantenerse lejos de las áreas donde existan grandes colonias de ratones u otros animales carnívoros silvestres.
*Emplear repelentes para evitar que las pulgas o garrapatas les piquen.
*Consultar con un médico la prescripción de algunas dosis preventivas de sulfamidas o tetraciclinas.
*Mantener una buena higiene en las áreas próximas a donde merodeen o tengan sus nidos los animales portadores de este mortífero bacilo de la peste.
