La cultura afroantillana es la expresión popular de los sentimientos de los individuos que habitan esta parte del mundo. El Caribe no es una zona geográfica, sino una confluencia de etnias, lenguas, sonidos, colores y sabores que se amalgaman para formar una identidad cultural con sus propios matices. Y la música alcanza, tal vez, uno de los sitiales más altos como forma de exteriorizar esta identidad.
Entre los artistas que le han cantado a esta región mágica está Rubén Blades. Le ha cantado a su patria grande, Panamá, pero también en sus interpretaciones menciona a las distintas provincias que componen su patria. Entre ellas, obviamente, a la ciudad de Colón.
La ciudad de Colón, urbe caribeña por derecho propio, ha sido nombrada por Blades en distintos temas musicales, aludiendo a diferentes circunstancias. En la canción West Indian Man (del álbum Amor y control), dice al inicio (en idioma inglés): “este tema se lo dedico a Colón, Bocas del Toro y Río Abajo en Panamá”. Esta canción es un verdadero monumento musical a la inmigración de los habitantes de las islas del mar Caribe a nuestro país que contribuyeron a la construcción del canal de Panamá.
La inmigración también es abordada en el tema Puente del Mundo (del álbum Tiempos), pero se trata de la inmigración española, cuando canta: “por la ciudad de Colón, al filo de un aguacero llegaron tres carabelas”. También la comida afrocaribeña, indisolublemente ligada a nuestra identidad, merece un soneo humorístico: “Allá en Colón, por la calle 4, comiendo Domplin de carne de gato”. (Del tema Y tu abuela, álbum The Last Fight). Se hace mención al domplin, un plato típico muy consumido en todo Panamá, especialmente en las costas del océano Atlántico.
La fiesta y el jolgorio es una característica intrínseca del colonense. Es común escuchar el estribillo: “si es de Colón, sabe bailar”. En el tema Noches del ayer (álbum Antecedentes) se convoca a los dioses de la parranda a que vayan a Colón: “Paso de colores y gente en urgente confusión, el pito del tren invita: vamos a Colón”. La farra se materializa cuando menciona un grupo musical de aquellos días (finales de los años 60, inicio de los 70) y un antiguo bar que estaba ubicado en la calle 8 y Avenida Meléndez: “Y en Colón con los Grubeys en la Tip Top”. También en la canción Tas caliente, del álbum Antecedentes, dice: “Hay una fila de gente para caerle encima de Río Abajo hasta Colón”.
Mi memoria recuerda dos presentaciones de Rubén Blades en la ciudad de Colón. La primera, cuando participaba en la campaña política a la Presidencia de la República, con el Movimiento Papa Egoró. Esa actuación se realizó en el Paseo Juan Demóstenes Arosemena (conocida como la avenida Central) y Calle Tercera. La otra presentación acaeció en los terrenos de la feria de Colón, en lo que es hoy el puerto de cruceros.
El autor es docente universitario
