La semana pasada estuvo en Panamá el cantante argentino radicado en EU, Rabito, quien dio un concierto el sábado en la noche en la comunidad apostólica Hossana, con muy buenos comentarios.
Para los que no lo conocen, Rabito como se empezó a llamar Juan Carlos Fernández en 1981 empezó como rockero. En su juventud practicaba hasta seis horas en su batería e integró un grupo de rock llamado Los Hampones.
Su primer éxito fue el tema Estrechándome con lo que comenzó su carrera como cantante y productor. Otras canciones que alcanzaron los primeros lugares de ventas fueron: Amante Latino , Amarte una vez más , Las puertas de mi corazón , No me marcharé , Mi querida María , Amor no me abandones , Yo el idiota .
Yo vengo de una vida viciada de marijuana, cocaína, mujeres, dinero, etc., hasta que mi cabeza explotó, así describe como cambió su vida hace 23 años cuando se dedicó a crear música cristiana.
El giro se dio cuando un amigo le contó que su padre se había curado de un cáncer terminal gracias a una oración de fe en el nombre de Cristo.
Desde entonces trata de reflejar ese cambio de vida en su música. Es una música que habla de las cosas de Dios sin que sea música religiosa, al alcance de la gente que compra cualquier tipo de música. Habla de Dios, pero de una forma que es accesible, que no te agarra de una oreja y te mete dentro de una iglesia, que no te hace un marciano religioso, que no te hace un aparato fuera de contexto de lo que es el mundo de hoy, del año 2003, explicó el artista.

