Jacarandosa, arrebatada, apacible, desvergonzada, arrebiatada y morbosa. Con reminiscencia de la barba del maíz.
Como un caleidoscopio, gradúa sus tonalidades. Gramática productiva. -¡Tusa!. Interjección. -¡Tengo una tusa!. Nombre.
-Es un tusa. Adjetivo. -¿Cómo quedó? Como tusa. Verbo.
De la mazorca, es el hueso o la hoja que la envuelve, según la comunidad de su aposento. Abre un abanico de opciones retóricas, entre ellas aquellas referidas al desperdicio. Ni qué indicar sobre la borrachera: una tusa.
Quien narra y pregona en la Ligia Elena, del maestro Rubén Blades, de boca de la familia atribulada, le espeta: “Es un tusa”. En alusión al inservible hueso del maíz, que ni los marranos toleran.
Zape, pero al can. ¡Tusa! ¡Váyase! No esté velando al amo. Nadie lo invitó a la conversación ni al ágape.
Tundir –cortar- posee su participio regular (tundida,o) y el irregular (tusa, o). (Quedó tusa esa obra. Se imagina).
Lo contrario al imaginado relleno del Casco Antiguo, San Felipe, sobre el que alguna gente delira cuando se alterna el Viejo. Viejo y antiguo, sinónimos.
A aquello picoso, en algún lugar, se le adjetiva ‘tusa’.
A lo despreciable y de poco valor, referido a persona o cosa, entonces se le nombra con la palabreja.
En el Panamá contemporáneo, ‘La Tusa’ es la idea de la planeada Torre Financiera, que, en las narices del Elefante Blanco creado por Porras, será erigida como símbolo de la era martineliana.
Dramaturgia. Raúl Leis es uno de los escritores de teatro más prominentes del país. Llega a ese arte de la mano de su oficio de educador. Sus conocimientos políticos y su quehacer sociológico los explica a través de la representación teatral. Domina las técnicas de este arte y las desarrolla con conciencia estética y artística.
Raúl sobresalió en distintas facetas: en el análisis y activismo políticos y sociales, la comunicación social, la docencia y el pensar sociológico. A estas facetas integró la escritura teatral y conquistó galardones. Obtuvo mención de honor en el Premio Tirso de Molina de la Cooperación Española (1994). De sus cinco galardones del Premio Miró, cuatro fueron en la sección Teatro.
¿Qué caracteriza la obra teatral de Leis? Lo sustenta la dramaturga, escritora y profesora Alondra Badano, en reciente tertulia de la Fundación Nuestra Lengua.
Como leña para desarrollar sus inquietudes intelectuales, políticas y profesionales, Leis se apropia de la dramaturgia y se convierte en un creador de obras elaboradas, con una adecuada definición del carácter de sus personajes, sobre todo populares. Como en Mundición, en la que son marcados tres registros de lenguaje: uno de ellos, el del protagonista, Melquiades.
El contenido es de persistente interés social. En los títulos puede percibirse: Carta a Héctor Gallego –el sacerdote desaparecido en el decenio de los 70-, La cantina de Pancha Manchá –surgida del poema de Demetrio Korsi-, Primero de Mayo, El nido del macúa, Lucecita González, María Picana, Mundición y Lo peor del boxeo.
El Teatro Rayuela representará a finales de este mes El puente –Miró 2001-, con la interpretación de Victoria Mendoza y Javier Romero. En esta pieza, subraya la angustia del panameño, a través de un pareja que intenta suicidarse desde el Puente de las Américas.
