La contaminación del lago Alajuela, en el Parque Nacional Chagres, amenaza el suministro de agua potable a 1.6 millón de residentes de Panamá y Colón, que se abastecen a través de la potabilizadora Federico Guardia Conte, del corregimiento de Chilibre.
En ese sentido, representantes de la Fundación Parque Nacional Chagres y moradores cercanos a la reserva denunciaron ayer que la empresa cementera Cemex está contaminando el río La Puente, principal afluente del lago Alajuela.
La directora ejecutiva de la fundación, Rosa María Guerra, señaló que la explotación minera se lleva a cabo en el área de amortiguamiento del parque, donde nace el mencionado río.
Guerra instó a los responsables de la Autoridad Nacional del Ambiente (Anam), la Autoridad del Canal de Panamá, el Instituto de Acueductos y Alcantarillados Nacionales, así como al Ministerio de Comercio e Industrias a detener la contaminación.
Por ejemplo, solicitaron revisar los estudios de impacto ambiental y la forma como se otorgaron las concesiones. Igualmente, piden se evalúe el manejo especial que debe tener la zona de amortiguamiento del parque natural localizado en el norte de la capital.
Luznilda Urrutia, residente de la comunidad Victoriano Lorenzo, en Chilibre, mencionó que la extracción de minerales está convirtiendo al río en un “enorme charco de agua gris”.
Para el exasesor legal de la Anam Harley Mitchel esto es “inaudito e injustificable”, porque en la cuenca del Canal de Panamá existen suficientes instrumentos de gestión ambiental para que las empresas grandes o pequeñas no contaminen los recursos naturales.
Estos señalamientos fueron hechos por los afectados en el Centro de Incidencia Ambiental.
Pero en la Anam dicen que la empresa Cemex cumple con las normas exigidas para desarrollar su proyecto dentro de la zona de amortiguamiento.
Gina Forte Taylor, representante de Cemex, dijo a TVN Noticias que una práctica que ellos realizan, independiente de las normas existentes, es el monitoreo trimestral de las aguas.
