La Policía Nacional capturó ayer en Veraguas a Enrique Jaén Chérigo, sospechoso de conducir el automóvil que arrolló a la ciclista Mónica Licona.
Jaén Chérigo, quien abandonó el vehículo después de embestir a Licona, estaba entre el cielo raso y el techo de una casa en Santiago.
Una semana después del atropello mortal de la ciclista Mónica Licona, la Policía Nacional capturó a Enrique Edwin Jaén Chérigo, principal sospechoso de la muerte de la joven de 22 años de edad.
De acuerdo a informes de la Policía, Jaén Chérigo estaba dentro de una casa en la barriada Las Perlas en Santiago, provincia de Veraguas. Al verse rodeado –en horas de la madrugada– Jaén Chérigo se escondió entre el cielo raso y el techo de la vivienda. Pero los agentes lo encontraron y lo bajaron a la fuerza. Luego lo lanzaron contra el piso boca abajo para ponerle las esposas.
El fiscal auxiliar, Marcelino Aguilar, y el director de la Policía, Omar Pinzón, viajaron hasta Santiago tras conocer la captura. Una vez llegaron, explicaron que el sospechoso estaba dentro de una casa alquilada. Allí había otras personas que igualmente fueron detenidas. La captura de Jaén Chérigo, quien se mantenía prófugo, se dio tras informes que suministró la ciudadanía. “Quiero agradecer a la comunidad; así fue que nosotros tuvimos esa información de gran valor y certera”, dijo Pinzón. Indicó que ya pagaron los $20 mil de recompensa. La Fiscalía de Homicidio tomó declaración a Jaén Chérigo, quien alquiló el automóvil Kia que impactó a Licona.

