El apoyo de los votantes a la independencia de Cataluña está disminuyendo cuando faltan menos de tres meses para un referendo, reveló ayer una encuesta en la próspera región del norte de España.
De acuerdo con la encuesta, el 49.4% de los catalanes se opone a la secesión, un punto porcentual más que en marzo; en tanto el 41.4% está a favor de la independencia, una baja de tres puntos.
El resto de los encuestados no sabía o no respondió. La encuesta, publicada el viernes por el Centro de Encuestas de Opinión del gobierno regional, se basó en mil 500 entrevistas recientes cara a cara.
El margen de error es de más/menos 2.53 puntos. Por otra parte, el gobierno central dijo el viernes que realizará auditorías del gasto público catalán para asegurarse de que no se emplee dinero de los contribuyentes en la consulta.
Madrid sostiene que el referendo propuesto para el 1 de octubre es inconstitucional, y amenazó con cortar el financiamiento a Cataluña si sigue adelante con la consulta secesionista.
En respuesta, la llamada Generalitat acusó a Madrid de discriminación y de intentar llevar a la quiebra a la región.
En un comunicado, el Gobierno, con sede en Barcelona, acusó a Madrid de “tratar de poner en riesgo los servicios sociales para evitar que vayamos a las urnas”.

