La venta de la llamada comida chatarra dentro y en los predios de los centros escolares del país podría terminar en los próximos meses, en virtud de que el Ministerio de Salud (Minsa), el Ministerio de Educación (Meduca), la Cámara de Comercio, Industrias y Agricultura de Panamá (Cciap) y el Sindicato de Industriales de Panamá consensuaron un decreto ejecutivo para regular esta actividad.
Pese a que la aplicación aún está sujeta al refrendo del presidente de la República, Juan Carlos Varela, y a su publicación en la Gaceta Oficial, se trata de un primer paso para regular la venta de productos que causan problemas de salud pública, como obesidad, hipertensión y diabetes.
La directora del Departamento de Nutrición del Meduca, Flavia Fontes, explicó que el decreto ejecutivo contempla prohibir la venta de bebidas gaseosas (sodas) y aromatizadas, las cuales no contienen ningún aporte nutricional.
El documento también advierte de que no se podrán comercializar snacks no saludables, caramelos, pastillas ni frituras.
Además, regula la venta en los predios cercanos a los centros escolares, como las aceras, para evitar que los niños al salir tengan acceso a esos productos.
Fontes expresó que, en cambio, el decreto ejecutivo permite la venta de todo tipo de frutas (ver lista de alimentos recomendados), siempre que no estén acompañadas de sal, vinagre y Kool aid, entre otros.
Para Fontes, el acuerdo, logrado después de 14 reuniones y más de un año de trabajo, es positivo y una oportunidad para corregir malas prácticas que causan problemas de salud pública.
SALUD PÚBLICA
Por su parte, la directora ejecutiva del Sindicato de Industriales de Panamá, Melissa Miranda, confirmó que trabajaron con representantes del Minsa y el Meduca en una mesa técnica, en la discusión del decreto ejecutivo que regula la oferta de alimentos en los quioscos y las cafeterías escolares.
Agregó que el documento recoge aspectos como la exposición a la publicidad, promoción y patrocinio de alimentos en los centros educativos en todo el país, y dicta otras disposiciones.
Miranda señaló que, en general, la industria de alimentos y bebidas recomendó, con base en el borrador presentado por las autoridades, las condiciones y parámetros para promover un estado de vida saludable.

Sostuvo que una vida saludable se puede conseguir con iniciativas como los códigos de autorregulación y con la implementación de tecnología e innovación en nuevos productos, entre otros.
También indicó que la industria está consciente “de que nuestro país no escapa a los problemas de obesidad y enfermedades crónicas no transmisibles”.
No obstante, consideró que la forma adecuada de hacer frente a esas enfermedades es a través de la educación, mas no mediante la prohibición o regulación.
Otro que abogó por educar a la población más allá de la regulación y la prohibición de comportamientos es el director de la Camarita de Alimentos de la Cciap, Frank Tedman, quien participó de las reuniones del gremio con representantes del Minsa y el Meduca.
Tedman agregó que la industria de las gaseosas ya había entrado en un proceso de autorregulación para no vender sodas a niños menores de 12 años en las escuelas.
Añadió que todos los que forman parte de la industria de alimentos y bebidas no tienen ninguna objeción en colaborar y trabajar para lograr el bienestar y la salud de la población, a través de buenos hábitos alimenticios y estilos de vida saludables.
“Para nosotros, es importante la educación para establecer la manera correcta de tener una nutrición balanceada y promover estilos de vida saludables”, dijo Tedman.
Entre tanto, el presidente de la Confederación de Padres de Familia de la República de Panamá, Eleazar Gómez, felicitó a las autoridades del Minsa y del Meduca, así como a los gremios del sector privado, por llegar a un acuerdo que beneficia a la población estudiantil.
No obstante, indicó que espera que el Meduca esté vigilante de que se cumpla con el contenido del decreto ejecutivo cuando comience a aplicarse, porque es la única manera de garantizar una alimentación sana, balanceada y nutritiva durante el periodo escolar.
Añadió que, de esta forma, también se pueden lograr cambios culturales en el estilo de alimentación de la población.
Informes del Minsa especifican que en la población infantil –de 4 a 12 años– 1 de cada 10 niños tiene problemas de obesidad y 1 de cada 5 presenta sobrepeso.