Director de la CSS admite que el IVM entraría en déficit a partir de 2019

El sistema de pensiones del que hoy dependen 200 mil jubilados entrará en números rojos entre este y el próximo año. Los gastos anuales sobrepasarán los ingresos y así entrará en déficit el programa de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM) de beneficio definido.

Los pagos de pensiones aumentan anualmente en un promedio de $100 millones, y las autoridades reconocen que se llegó a un punto de quiebre. “Las reservas se pueden empezar a usar este o el otro año”, reconoció el director de la Caja de Seguro Social (CSS) , Julio García Valarini, en una reunión convocará ayer para hablar del sistema de salud, sus desafíos y los retos administrativos.

A pesar de que el déficit plantea urgencia para tomar decisiones que garanticen más ingresos al sistema de pensiones, Valarini considera que el Estado “tiene tiempo”. “Tampoco hay que dar un mensaje apocalíptico”, porque, a su juicio, se está frente a una situación que se puede solucionar en los próximos años. “La ventana se está cerrando, pero hablar de una crisis no es cierto”. Su consuelo es la nefasta crisis en el sistema de pensiones que dio lugar a las reformas de 2005. En ese momento, cuando se empezaron a discutir los cambios, ya la CSS le había echado mano durante dos años a las reservas del IVM. El programa de pensiones se divide en dos subsistemas: el de beneficio definido, que se encuentra en cuidados intensivos; y el subsistema mixto, creado en las reformas de 2005 para que las nuevas generaciones cotizaran a través de cuentas individuales. César Tribaldos, exdirectivo de la CSS, considera urgente la toma de decisiones. El Estado tendrá que destinar entre $400 millones y $500 millones para pagarle a los jubilados, si no se hace una reforma profunda a la institución, creando dos organismos, uno que maneje el tema de las pensiones y otro el de la salud. Vea: IVM definido, con los días contados

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