Tras una semana de paréntesis, el principal artífice de los contratos entre Italia y Panamá, Valter Lavítola, volverá a sentarse en el banquillo de los acusados en las aulas contiguas 219 y 220, situadas en el segundo piso de la ciudad judicial de Nápoles, por dos juicios que encara ante la justicia italiana esta semana.
En el juicio de hoy Lavítola está imputado –junto al ex primer ministro de Italia Silvio Berlusconi– por haber corrompido en 2008 con coimas de hasta 4.1 millones de dólares al entonces senador Sergio de Gregorio.
El supuesto crimen catapultó a Lavítola hasta lo alto de la pirámide política de derecha italiana, convirtiéndolo en la persona de confianza del hombre que gobernó Italia durante casi 20 años.
El periodista de Radio Panamá Joan Solés contará ante los jueces las confesiones que Lavítola le hizo el 19 de junio de 2013 mientras cumplía arresto domiciliario.
El que fuera amigo de Martinelli y Berlusconi multiplicó casi por tres la cifra pagada a diversos parlamentarios para que cambiaran su voto y así “echar a Mortadela”, expresión despectiva que Lavítola utilizó refiriéndose al ex primer ministro Romano Prodi.
En el juicio de mañana –en el que Lavítola está imputado por extorsión– está previsto que declaren como testigos el embajador de Italia en Panamá, Giancarlo María Curcio, el ex director comercial de Finmeccanica Paolo Pozzessere y Solés.
Sus testimonios serán claves para desentrañar la enrevesada trama de oscuros intereses que rodeó la promesa de Berlusconi sobre construir el hospital pediátrico de Veraguas a cambio de futuras adjudicaciones de obras, según la tesis de los fiscales.
Lavítola también está acusado por el Tribunal de Roma por corrupción internacional en Panamá. El próximo 23 de junio se celebrará el juicio.
La procuradora de la Nación, Ana Belfon, confirmó que Ramsés Barrera y Greta Marchosky, secretario general y secretaria de Asuntos Internacionales, respectivamente, viajaron a Italia para darle seguimiento a las solicitudes enviadas con relación al proceso que se le sigue a Valter Lavítola y la supuesta corrupción internacional en Panamá.
“Ellos se encuentran en Italia informándose del proceso y de algunas de las solicitudes que nosotros les hicimos y que no han respondido”.
Belfon negó que Panamá haya recibido asistencias judiciales sobre la investigación de los contratos de Finmeccanica y el Gobierno. Dijo que el personal que viajó la semana pasada a Italia abordará temas relacionados con las pesquisas en Nápoles y Roma.“Hemos enviado funcionarios de alto nivel para que vean la situación y, dependiendo de esto, se actuará”, aseveró la funcionaria.
Elio Núñez
