Tomás y Jerónimo Uribe Moreno, hijos del expresidente colombiano Álvaro Uribe, habrían participado en un fraude contra el fisco a través del negocio de exportación de chatarra en el que se involucró a una de sus empresas.
Dos hijos del expresidente y senador colombiano Álvaro Uribe negaron haber sido partícipes de una operación irregular de una empresa suya, vinculada a una red dedicada al cobro fraudulento de devoluciones de rentas del fisco por actividades relacionadas con la exportación de chatarra.
Una empresa de Tomás y Jerónimo Uribe habría aparecido en una lista de compañías que supuestamente hacían negocios fraudulentos con un acusado que negoció beneficios con las autoridades judiciales colombianas a cambio de información sobre sus actividades ilícitas, según el diario El Espectador. Se trata de James Francisco Arias, conocido como “el rey de la chatarra”. El negocio consistía en cobrar devoluciones de renta por exportaciones de chatarra que nunca se realizaron y que fueron ejecutadas por empresas de fachada.
En esa lista apareció la empresa Ecoeficiencia S.A.S. de los hermanos Uribe Moreno.
Tomás Uribe aseguró que su empresa fue víctima de un empleado y de un proveedor que cobraron de manera irregular una devolución de renta. Alega que al darse cuenta, “denunciamos a los proveedores” y descubrieron a un empleado suyo como copartícipe del ilícito.
