La ceguera de su hija no deberá ser un obstáculo para que ella pueda aprender, conocer las vocales, los números o saber que Panamá tiene forma de una S acostada, como lo enseñan en lo libros de textos de geografía en el nivel de enseñanza primario.
Para Mercedes González, madre de Ana (nombre ficticio), de tres años de edad, las nuevas oportunidades educativas ayudarán a las personas con discapacidad a tener acceso a la educación e integrarse a la sociedad.
A pesar de que Ana aún no asiste formalmente a la escuela ya cuenta con diversos textos escolares para no videntes y catálogos de textos en audio ( MP3), en los que podrá adquirir conocimientos.
La tarea de confeccionar estos libros especiales recae en el Centro de Recursos Educativos para personas con discapacidad visual Louis Braille del Instituto Panameño de Habilitación Especial (Iphe), creado en septiembre de 2012.
En este centro se han traducido al sistema Braille –una forma de lectura y escritura táctil para personas ciegas– al menos 20 textos escolares durante este año de los entregados por el Ministerio de Educación (Meduca) de forma gratuita a los estudiantes.
La traducción de estos libros de texto no es fácil, debido a la forma de redacción de los libros originales. Por ejemplo, los textos de ciencias sociales o español, utilizan términos e imágenes que no pueden ser empleados con un niño ciego o de baja visión.
La tecnóloga educativa y encargada del Centro de Recursos Educativos para personas con discapacidad visual Louis Braille, Yaira Yi Clare, explicó que esta iniciativa nació hace 50 años cuando la pionera Flor Isabel Paz confeccionaba los textos manualmente en la Escuela Nacional de Ciegos Helen Keller, del Iphe.
Yi Clare explicó que la misión del centro es transcribir, adecuar e imprimir en sistema Braille, relieve o formato sonoro, todo tipo de información educativa, laboral o literatura, requerida por personas no videntes.
En la actualidad, hay cinco centros del Iphe que también hacen estos trabajos para los estudiantes de sus sedes y la política del grupo es compartir todos los trabajos de traducción.
PASO A PASO
El proceso de creación de los libros escolares a Braille comienza con la digitalización de cada página del texto, para luego incluirlo en un programa de caracteres óptimos y por último al programa Duxbury, que transcribe cada palabra.
Según Yi Clare, si la página tiene imágenes, la misión de las tecnólogas y profesores es explicar y describir lo más posible el dibujo o figura para que el niño invidente pueda entender.
El sistema también puede incorporar las imágenes en Braille de las figuras geométricas, las cuales son una ayuda para que el estudiante pueda entender más fácilmente las matemáticas.
Incluso, utilizar otros programas como Diseños Gráficos Táctiles (TGD, por sus siglas en inglés) y máquinas para realizar relieves (con un equipo llamado horno fucer), entre otras técnicas para hacer imágenes que con el simple tacto puedan ser imaginadas por los niños y jóvenes.
El contenido que hay en una página de texto normal para videntes puede representar hasta cuatro páginas de texto Braille, destacó la encargada del centro.
Además, en el Centro de Recursos Educativos para personas con discapacidad visual también traducen al Braille novelas, investigaciones y libros especiales para los niños que empiezan a aprender el sistema Braille.
Solo este año se han confeccionado cerca de 100 libros para niños que están aprendiendo con Braille.
Los libros y demás materiales se elaboran por pedidos de los docentes y los padres de familia.
MATERIALES Y COSTOS
En la elaboración de un texto para personas con discapacidad visual se utiliza papel Braille gramaje 120, que es fuerte y blanco, se imprime en la impresora Braille y se anilla de forma manual.
El costo por año de mantenimiento de este centro es de $102 mil que aporta el Iphe y otros $41 mil 885 que asigna el Meduca para pagar el personal y compra de insumos.
