La ONU lamentó ayer la lentitud en los procesos judiciales por crímenes de la guerra civil en Guatemala (1960-1996), cometidos principalmente por las fuerzas de seguridad del Estado contra poblaciones indígenas.
El relator especial de las Naciones Unidas para la promoción de la verdad, justicia, reparación y garantías de no repetición, el colombiano Pablo de Greiff, señaló en un comunicado que los casos se ven entorpecidos por “tácticas dilatorias” de la defensa de los señalados de matanzas, sobre todo exjefes militares.
El alto funcionario de la ONU señaló que, “aunque se ha avanzado en el enjuiciamiento de exfuncionarios de alto rango por crímenes de lesa humanidad y genocidio”, a más de dos décadas del fin del conflicto los casos se retrasan.
“La lentitud de los procesos, principalmente por el uso sistemático de tácticas dilatorias por parte de la defensa, ha puesto en peligro el derecho a la justicia de víctimas que ya están en edad avanzada”, agregó.
De Greiff hizo el pronunciamiento en momentos en que Guatemala conmemora el Día Nacional de la Dignidad de las Víctimas del Conflicto Armado Interno. Uno de los casos principales es el juicio por genocidio contra el exdictador Efraín Ríos Montt, de 91 años.

