Ocupantes del residencial El Corotú, en Vacamonte, distrito de Arraiján, provincia de Panamá Oeste, rechazaron la construcción del proyecto habitacional Ciudad Esperanza, en un terreno colindante con su barriada aduciendo que desvalorizará sus propiedades.
Los manifestantes cerraron la entrada al residencial e impidieron el paso de vehículos hacia el predio en que se desarrollará el proyecto.
Jaime Chan, vocero de los manifestantes, aclaró que no fueron consultados, y explicó que al quedar ubicadas sus casas cerca de un proyecto de interés social, sus propiedades sufrirían una depreciación, sin excluir que el tránsito de equipo pesado afectará las calles.
La protesta coincidió con el acto de entrega de la orden de proceder al consorcio CCA MCM, el cual ganó la licitación por $137 millones.
Según el presidente de la República Juan Carlos Varela, se trata de un proyecto para familias que residen en el distrito de Arraiján, aunque no se “si alguna familia viene de Samaria”, dijo.
Frente al rechazo y las críticas, el ministro de Vivienda y Ordenamiento Territorial, Mario Etchelecu, dijo que “el proyecto tiene muchas bondades”, entre ellas, la construcción de una escuela de excelencia, un centro universitario y áreas recreativas.
Más adelante, anunció que se construirá otra carretera de acceso al proyecto, el cual contempla la construcción de 2 mil 500 soluciones habitacionales, repartidas en edificios de cinco niveles.
Aunque no precisó el costo de las viviendas, el ministro Etchelecu dijo que la mensualidad será de $50, que será cancelada al Banco Hipotecario Nacional.
Los intentos de lograr un acuerdo fracasaron y, por el contrario, los ánimos se caldearon aún más, en parte por la negativa de las autoridades de permitir el ingreso de los residentes de El Corotú al sitio en que se realizaría el acto de entrega de la orden de proceder.

