Gertrudis Moreno, Dixenia Villarreal y Pastora Quintero tienen dos cosas en común: tomaron y se bañaron con agua contaminada con atrazina.
Estas personas viven en áreas de extrema pobreza en Los Santos y Herrera, como Soberanía, El Agallito y Los Olivos, donde el Gobierno advirtió no consumir el agua potable, porque tenía partículas del herbicida tóxico.
Moreno, Villarreal y Quintero dicen tener comezón y ardor en la piel, mientras que otros vecinos comentan padecer problemas intestinales.
Aunque no hay una certeza en la relación con el consumo de agua contaminada y estos malestares, los enfermos culpan a la atrazina como la causante.
No obstante, José Delgado, director de Salud de Herrera, y Yuri Huertas, director médico del hospital Gustavo Nelson Collado [antiguo Vigía], aclaran que se trata de un químico de un bajo nivel tóxico y que los casos de diarrea son propios de la época. “No hay incremento”, dijo.
Por su parte, Huertas informó que en el Vigía se han suspendido las cirugías programadas y solo se atienden emergencias. Detalló que diariamente en promedio atienden 10 operaciones programadas, las que han tenido que ser pospuestas.
El Gobierno informó ayer que los niveles de atrazina se mantienen entre 12 y 14 partes por billón.
