El Centro de Incidencia Ambiental (CIAM) se reunió ayer con las comunidades que habitan en la cuenca del río Chagres, para tratar la problemática de medio ambiente que afecta la zona.
Según el biólogo de esta oenegé Isaías Ramos, en dicho encuentro se abordaron las molestias y los problemas causados por el desarrollo acelerado de los proyectos urbanísticos a gran escala, la pérdida de vegetación y las afectaciones a las fuentes hídricas.
Otra de las inquietudes que aquejan a esas comunidades son las concesiones mineras, ubicadas a escasos metros del lago Alajuela.
Desde hace años, los residentes de corregimientos como Chilibre y Las Cumbres vienen solicitando una mayor presencia de las autoridades del Ministerio de Ambiente y del Municipio de Panamá.
Ante la problemática ambiental que presenta esta zona, la vicealcaldesa Raisa Banfield mostró su preocupación por la acumulación de basura en el Parque Nacional Chagres y el impacto negativo que ello podría tener en el ecosistema.
Banfield, además, mostró su inquietud por las concesiones mineras otorgadas a empresas en las zonas de amortiguamiento de esa área boscosa por parte de administraciones anteriores.
Igualmente, dijo creer que tanto a entidades nacionales como al gobierno local le ha faltado más correlación entre la visión de desarrollo sostenible y la conservación del área. “Se necesita sopesar los beneficios a corto, mediano y largo plazo versus los costos ambientales y sociales”, recalcó la funcionaria, y puntualizó que todavía hay tiempo para evitar cualquier impacto negativo en la reserva natural.
