Nacido en Salzburgo, Austria, el 7 de febrero de 1889, Josef Thorak llegó a ser muy conocido en la Alemania nazi por sus “grandiosos monumentos”.
En 1933 se unió a Arno Breker como uno de los dos “escultores oficiales” del Tercer Reich.
Los caballos de Thorak llegaron a adornar la Cancillería del Reich en Berlín, construida por Albert Speer, quien fuera uno de los más cercanos y fieles colaboradores de Hitler y considerado el arquitecto del régimen. Registros históricos indican que Speer se refería a Thorak como “mi escultor”.
Thorak falleció a los 63 años, el 26 de febrero de 1952 en Hartmannsberg, Alemania, por un ataque de asma. Un año antes se había organizado en Múnich un evento para rendirle tributo a él y otros artistas nazis que pasaron al olvido, igual que sus obras, con la caída del imperio de los mil años.
(Con información de internet).