Hoy concluye el proceso de consulta pública que impulsa el Ministerio de Ambiente sobre el borrador del Plan de Acción Nacional de Basura Marina 2021-2026, que tiene como fin que la población realice aportes en la limpieza de los ecosistemas costeros y mares del país.
Se trata de un tema que inquieta tanto al ministerio como a oenegés que defienden la conservación de los ecosistemas, ya que un informe de 2019 elaborado por el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente calculó que, por año, Panamá descarga en el mar 102 mil 229 toneladas de basura generada en tierra firme.
Lo anterior representa unas 11 toneladas de desechos por hora que van a parar a las costas y mares del país.
En total, 61 mil 553 toneladas al año provienen de actividades humanas en zonas urbanas y 40 mil 675 toneladas al año de actividades humanas en zonas rurales.
Los actores
De forma general, la basura marina en Panamá se presenta en una gran diversidad de tipos, formas y tamaños, desde microplásticos hasta grandes buques abandonados en las costas.
Según el Ministerio de Ambiente, este plan será por cinco años y tiene como objetivo ser una guía para reducir y eliminar la basura marina que atenta contra la biodiversidad.
Eso implica desarrollar una estrategia de limpieza costera anual; fortalecer los programas de gestión de residuos que desarrollan las oenegés y los contenidos educativos en las escuelas; involucrar a la empresa privada, y crear incentivos.
Además, se establecerían leyes para fortalece el régimen de multas y sanciones.
Para Osvaldo Jordán, director del Centro Regional Ramsar para el Hemisferio Occidental, este es uno de los mayores retos que tiene el país en conservación ambiental y se debe hacer énfasis en la creación de la economía circular.
“Hay que ir más allá del reciclaje que se practica actualmente en algunas áreas, y disminuir plásticos y otros materiales que contaminan los mares”, acotó.
