La educación en salud sexual y reproductiva entre pares, supervisada por un profesional adulto, sigue siendo una herramienta eficaz en la prevención del embarazo precoz y de eso dan cuenta los datos del Fondo de Población de las Naciones Unidas (Unfpa, por sus siglas en inglés).
En efecto, un reciente informe del Unfpa indica que de las 398 adolescentes participantes en las capacitaciones brindadas en los Servicios de Salud Amigables y de Calidad para Adolescentes (SSAA) entre 2012 y 2015, solo 3 resultaron embarazadas; y de las mil 235 a las que se brindó asistencia entre 2016 y 2019, 4 resultaron embarazadas en ese periodo.
Tasa de fecundidad en Panamá
En Panamá, en el rango de edad de 10 a 19 años, hubo en 2019 una tasa de fecundidad de 35.5 nacimientos vivos por cada mil mujeres.
Este número es mayor en el rango de 15 a 19 años, en el que la tasa es 67.2 nacimientos vivos por cada mil mujeres. Datos del Minsa indican que el año pasado ingresaron a control prenatal 9 mil 724 jóvenes de entre 10 y 19 años.
Los datos fueron presentados recientemente en el Foro Sector Salud Responde a la Niñez y Adolescencia, en el que Edilma Berrío, del Unfpa, sostuvo que desde 1995 hasta 2020 los SSAA han alcanzado a 280 mil 803 adolescentes.
En el país hay 125 instalaciones y 878 profesionales que brindan los SSAA, precisó.
Además, dijo que durante la pandemia desarrollaron una herramienta de SSAA a través del celular, a fin de que los jóvenes también tengan la orientación necesaria para que no pierdan las oportunidades de la vida.
El estudio, titulado Consecuencias socioeconómicas del embarazo en la adolescencia en Panamá, deja en evidencia los costos de oportunidad que representa un embarazo en edad temprana.
El estudio señala que las mujeres que son madres en la adolescencia tienen más dificultades para conseguir empleo y cuando lo hacen es de peor calidad que el de aquellas que fueron madres en la edad adulta, según el Unfpa.
Por ejemplo, en 2019 las mujeres panameñas de entre 20 y 57 años de edad que alcanzaron la educación universitaria percibieron 14 mil 900 dólares anuales en promedio, mientras que aquellas que alcanzaron el nivel vocacional- no universitario con nivel secundario percibieron, en promedio, 7 mil 400 dólares anuales. En tanto , aquellas que alcanzaron únicamente el nivel educativo primario (hasta 6 años de escolaridad) percibieron apenas 5 mil dólares anuales, dice el documento.
Datos del Ministerio de Salud (Minsa) también muestran que el año pasado ingresaron a control prenatal —en instalaciones de su dependencia— un total de 9 mil 724 jóvenes de entre 10 y 19 años. Son 5 mil 72 jóvenes más que las que ingresaron a control en 2019, cuando hubo 4 mil 652. Estas estadísticas no incluyen la población que recibió atención en la Caja de Seguro Social ni en clínicas privadas.

