La Fiscalía contra la Delincuencia Organizada mostró ayer 39 pruebas al Tribunal de Juicio del caso pinchazos, relacionadas con los ascensos, vacaciones y aumentos salariales del exagente de inteligencia del Consejo de Seguridad Nacional (CSN) Ronny Rodríguez.
Esto, en medio del juicio que se le sigue al expresidente Ricardo Martinelli por la supuesta comisión de los delitos de interceptación ilegal de comunicaciones y seguimiento, entre 2012 y 2014.
La fiscalía detalló, por ejemplo, que Rodríguez entró al CSN como subteniente y a su salida, en 2014, tenía el rango de subcomisionado de la Policía Nacional (PN).
Los fiscales también narraron que el exagente de inteligencia tuvo la intención de culminar sus servicios en la fuerza pública a través de una jubilación anticipada, pero luego de un proceso administrativo se revocó esa pretensión, pues Rodríguez no tenía los requisitos.
Todo esto se dio durante los primeros meses del gobierno de Juan Carlos Varela (2014-2019).
Entre los documentos leídos por la parte acusadora también se encontraban los nombramientos y ascensos de William Pittí, otro de los agentes que estaba en el equipo de inteligencia del CSN, y que junto a Rodríguez fue clave para consolidar el espionaje, según la fiscalía.
“Tres personas quedaron aisladas en el edificio 150 [del CSN], aisladas porque se les prohibió la entrada [a esa oficina] a los demás miembros del equipo de inteligencia. Estas personas son las únicas que pueden decir que era lo que se hacía ahí”, dijo el fiscal Ricaurte González a los periodistas.
Dos de esas personas que mencionó el fiscal serían Rodríguez y Pittí.
La defensa de Martinelli no hizo observaciones sobre la información leída en el juicio. El exmandatario, en cambio, reiteró que el juicio está “amañado y falseado”. “Han hecho una serie de elucubraciones brujas, chimbas, en un juicio que no tiene ninguna razón de ser”, dijo.
Carlos Herrera Delegado, abogado de los querellantes Mitchell Doens y Balbina Herrera, señaló que con los documentos que la fiscalía expuso ayer se establece que Rodríguez y Pittí tuvieron “un ascenso meteórico que no tiene ninguna unidad policial en la historia de la República de Panamá”.
En la tarde, la fiscalía inició la lectura de los siete cuadernillos que contienen la recopilación de correos, transcripciones de audio, fotografías y videos, que se presume son producto de la vigilancia.

