Luego de siete días de estar en el estrado, ayer el testigo protegido culminó su declaración en el juicio seguido al expresidente Ricardo Martinelli (2009-2014) por presuntas escuchas ilegales.
Al mediodía de ayer, el tribunal de juicio dio por terminada la participación de este testigo, luego de que la defensa del exmandatario concluyera con el contrainterrogatorio sobre las afirmaciones hechas a preguntas de la Fiscalía contra la Delincuencia Organizada.
La participación del testigo protegido —un exagente del Consejo de Seguridad Nacional (CSN)— es una de las razones por las que, el 20 de noviembre de 2020, el Tribunal Superior de Apelaciones anuló el fallo de “no culpable” del 9 de agosto de 2019, a favor del expresidente, y ordenó que se celebrara un nuevo juicio. Según el referido tribunal, no se había valorado adecuadamente su testimonio.
Carlos Herrera Delegado, abogado de Mitchell Doens, aseguró que con su nueva participación, el testigo fue contundente al relacionar al expresidente con las interceptaciones realizadas entre los años 2012 y 2014.
De sus declaraciones, según Herrera Delegado, se pudo establecer que Ronny Rodríguez, exagente del CSN, era la persona que recibía las instrucciones sobre a quién pinchar o hacer algún tipo de seguimiento.
Para Herrera Delegado, el testigo reforzó la teoría del caso presentada por la fiscalía, por lo que ahora las juezas Iveth Francois Vega, Jennifer Saavedra Naranjo y Marysol América Osorio tienen un panorama más claro de cómo se dieron los hechos en el edificio 150 de Quarry Heigths, en donde funcionaban las instalaciones del CSN.
Las juezas aceptaron medidas de protección para el testigo, como la prohibición de divulgar su nombre, su imagen, su voz y su testimonio. Pero allegados al expresidente han mostrado videos en los que aluden a este testigo e intentan desacreditar su relato.
Para Herrera Delegado, la declaración del testigo dejó claro que el CSN adquirió tres equipos diferentes para hacer las interceptaciones. Explicó también los pormenores del entrenamiento recibido para manejar correctamente estos equipos.
Además, que la mayoría de las interceptaciones estaban dirigidas a políticos, en especial del Partido Revolucionario Democrático (PRD).
Mientras que la defensa del expresidente aseguró que durante el contrainterrogatorio, el testigo protegido entró en contradicciones y que su testimonio está lleno de inconsistencias. El abogado Alfredo Vallarino dijo que la fiscalía ha seguido utilizando a este testigo, a pesar de saber que su declaración contiene serias imprecisiones.
El juicio se reanuda hoy a partir de la 1:00 p.m., con la participación de las víctimas.


