El Tribunal Superior de Apelaciones del Primer Distrito Judicial mantuvo la detención preventiva a Miguel Almanza, único capturado por el homicidio de siete jóvenes perpetrado el pasado 17 de junio en Fuerte Espinar, Colón.
Los magistrados Greta Marchosky, Fernando Alonzo Valdés y Asunción Alonso, confirmaron de manera unánime la medida de arresto aplicada a Almanza por un juez de garantías.
Durante la audiencia, los magistrados consideraron que concurren elementos como riesgo de fuga, peligro para los testigos y de destrucción de prueba, que hacen necesario mantener la detención del investigado.
El fiscal David Medina alegó que las circunstancias de peligro para los testigos y la comunidad no han variado y que también existe el riesgo de destrucción de evidencias.
El abogado defensor José Antonio Moncada alegó que su cliente es inocente de los cargos que se le imputan y que es una persona humilde, que no cuenta con medios para evadir el proceso.
Miguel Almanza fue detenido por la Policía Nacional a través de un retrato hablado elaborado con información proporcionada por los sobrevivientes del ataque.
Almanza enfrenta cargos por la presunta comisión de los delitos de homicidio, femicidio, robo y privación de la libertad. Se le acusa de haber asesinado a sangre fría a las hermanas Azucena y Yulissa Montenegro (21 y 18 años) y Leydis y Yeleny Mariota (15 y 16 años). Además, habría asesinado a Bladimir Garay, de 18 años de edad, Santiago Carvajal (17 años), y Edgar Jiménez (22 años).
Un informe del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses reveló que todas las víctimas presentaban un disparo en la cabeza.
El pasado lunes, una jueza de garantías decretó legal la medida de detención preventiva contra Almanza y concedió a la fiscalía un término de seis meses para culminar la investigación de este caso.

