El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo ayer que Irán “parece estar reculando” tras ataques contra intereses estadounidenses en Irak en represalia por la muerte del general Qasem Soleimani, al indicar que no planea una nueva respuesta militar.
En un discurso televisado, Trump enfatizó que “no se perdieron vidas estadounidenses o iraquíes” por los misiles lanzados sobre dos bases militares en Irak, que albergan tropas de la coalición internacional que lucha contra los restos del grupo yihadista Estado Islámico.
Benjamin Netanyahu, primer ministro de Israel
“Se debe felicitar a Trump por actuar de manera rápida, audaz y resuelta contra este terrorista en jefe que fue el arquitecto y conductor de la campaña de carnicería y terror de Irán [...y eso] lo piensan muchos líderes del Medio Oriente”.
Si bien prometió imponer “de inmediato” sanciones económicas adicionales a Irán, acogió con satisfacción las señales de que Teherán “parece estar reculando” en la confrontación de ojo por ojo. Estados Unidos “está listo para abrazar la paz con todos los que la buscan”, dijo.
Sin embargo, Trump se ufanó de su decisión de ordenar el asesinato del máximo general, el viernes pasado. Soleimani, un héroe nacional en Irán, fue “el principal terrorista del mundo” y “debería haber sido liquidado hace mucho tiempo”, dijo.
Trump abrió su mensaje declarando sin rodeos que nunca permitiría a Irán dotarse de un arma nuclear. Luego, instó a sus aliados europeos y otras potencias a seguir su ejemplo y abandonar lo que queda del pacto internacional firmado en 2015 que buscaba limitar las ambiciones nucleares iraníes.
Horas después, el secretario de Estado, Mike Pompeo; el jefe del Pentágono, Mark Esper; la directora de la CIA, Gina Haspel, y el jefe del Estado Mayor, el general Mark Milley, informaron a legisladores y senadores, a puerta cerrada, de la situación.
Se prevé que la Cámara de Representantes, controlada por la oposición demócrata, vote hoy para evitar que Trump emprenda la guerra.
Mientras, dos cohetes estallaron la tarde de ayer en la Zona Verde de Bagdad, donde está la embajada estadounidense. El ataque ocurrió a 24 horas del disparo de 22 misiles iraníes a bases que albergan a soldados estadounidenses y de la coalición internacional. Es el tercer ataque en la Zona Verde desde la muerte de Soleimani.
