La demostración documentada acerca de la amistad y asociación entre la familia Bin Laden y la familia Bush desde tiempos del abuelo del actual presidente de EU quienes conformaron la que se conoce como la primera sociedad entre ambas familias, es cierta. Fue en Arabia Saudita y se llamó Arbusto. Declaraciones de ex-embajadores estadounidenses en aquel país así lo comprobaron. Otras sociedades han sido constituidas y existen, en varios países, inclusive, por supuesto, en EU, y son propiedad de las dos familias.
La contratación del joven Osama para prestar sus servicios a la Agencia Central de Inteligencia-CIA-empezó cuando EU saboteaba la guerra invasora de Rusia a Afganistán por los intereses económicos que sobre la miseria de los habitantes de aquel rico país existen. Osama recibió todo tipo de entrenamiento y apoyo de EU para este trabajo sucio. Luego de la muerte de su hermano cuyo avión fue derribado en vuelo, Osama se declara en contra de sus protectores y patrocinadores.
Desde allí y como parte de la política del miedo, este personaje ha sido convertido en el monstruo que dirige y financia el terrorismo en el mundo.
¿Será posible que un solo hombre tenga tanta capacidad, maligna energía, creatividad asesina y poder? Puede ser. Pero, ¿cómo es posible que los países más poderosos, encabezados por el más poderoso del mundo, con toda su capacidad bélica, tecnología, recursos económicos y estamentos numerosos de contrainteligencia, por tantos años y luego de haberles, como le atribuyen, causado tanto daño con sus atentados terroristas no hayan sido capaces de lograr su captura, rendición o muerte? Entonces, ¿para qué gastar tantos recursos en instituciones y personas que no son capaces de capturar a un hombre? ¿O es que no lo quieren capturar o ya lo mataron pero "debe" seguir vivo, pues resulta una justificación valiosa para algunos interesados?
Resultan sospechosos los comunicados de Osama que aparecen, en momentos precisos,
Leyendo una de las obras escritas por la investigadora y combativa periodista italiana Fiorella Operto, me entero de que ésta denunció en su país, días antes, la invasión a Panamá. Está misma autora sostiene, probatoriamente, en otra obra suya que el hueco en la capa de ozono, según científicos franceses sí existe, pero se cierra cada vez que se abre
por efecto de un fenómeno físico-químico. Según exposiciones, el último dueño de la empresa Dupont, dueño de la patente del químico gas conocido como CFC, con el cual funcionan varios artículos -aerosoles, refrigeradoras, aires acondicionados y otros-, declaró que al vencerse su patente en 1998, se había preparado una campaña fraudulenta sobre los efectos de este gas y la recomendación de usar, supuestamente, otro que resulta ser el mismo o con leve variante en su sigla. Con esto, los nuevos dueños de la nueva patente impedían que a bajísimos costos se usara el CFC que en realidad no es la causa de mantener abierto el hueco en la capa de ozono. Solo era una excusa para evitar competencia a bajos costos en el Tercer Mundo, o patio trasero para el continente americano.
Se han visto muchos ejemplos de falsedades y mitos para lograr fines económico-políticos en el mundo. Tal fue la serie radial del mítico David Harding que se transmitía en todo el orbe terrestre. El último invento, cruel, inhumano y genocida ha sido la invasión a Irak con el supuesto que ese país tenía armas de destrucción masiva. El mundo sabe bien qué países las poseen y cuál es el país que más tiene de estas, que las fabrica y las perfecciona cada día y que además las viene usando desde hace muchos años.
Por ello el papa Juan Pablo II dijo que esta era una guerra ilegal, inmoral e injusta y pidió varias veces que no se diera esta invasión que sigue causando destrucción, dolor y muerte, además de haber agudizado la crisis económica mundial.
Entonces, cabe preguntarse, ¿existe Osama Bin Laden o es solo un personaje mítico y cruel que, si bien existió, hoy solo se explota su imagen como vivo pues constituye la figura que justifica no solo el terrorismo sino la fuerza maligna a combatir pues es el peligro permanente para el Grupo de los Ocho y para las democracias del mundo? Lo cierto es que las democracias del Grupo de los Ocho nos castigan con políticas neoliberales, con sobreexplotación de nuestros recursos, con la abominable globalización y con los engaños de tratados que incumplen o manejan a su capricho a través de la OMC u otros recursos que se inventan. Insisto, la paz y el desarrollo no se construyen con la guerra, ni con la injusticia, ni con la mentira.