El barco más grande construido para fines culturales ha fondeado en aguas panameñas. La madrugada de este lunes, el Logos Hope cruzó el Canal con 400 voluntarios de 60 países a bordo y su millón de libros de variados temas.
El buque se detuvo en el muelle Patsa, en la antigua base de Rodman, después de siete días de travesía desde México, y en la entrada a la imponente nave un brasileño, una mexicana y una jamaicana, con indumentaria típica de sus países, daban ayer la bienvenida a los visitantes, en su especial apertura a Panamá.
Había un ambiente festivo, acompañado de melodías que entonaba la banda del Servicio Nacional Aeronaval (Senan). La embarcación, considerada la librería flotante más grande del mundo, pertenece a un conjunto de buques de la firma GBA Ships, organización alemana sin fines de lucro, encargada de ponerlos a navegar para llevar a cada puerto conocimientos, ayuda y esperanza.
Logos Hope, según explica Pavel Martínez, oficial de relaciones mediáticas, consta de 9 cubiertas, la cuarta de ellas es el hogar de más de 5 mil títulos repartidos en un millón de ejemplares. Los libros, ordenados por pasillos, se ofrecen a la venta desde 63 centésimos hasta 25 dólares, el valor más alto. Los textos están distribuidos en infantiles, liderazgo, gastronomía, familia, idiomas, turismo y espirituales. También hay juguetes, bolígrafos y suvenires.
Sobre la accesibilidad en la obtención de los libros, el estadounidense Randy Grebe, director de equipo de colaboración, destacó que se abastecen de contenidos por medio de alianzas con editoriales, “el fundamento del servicio es proveer libros de alta calidad a una fracción del precio habitual”.
El barco dispone de un programa cultural, en el que destaca la presentación de la obra de teatro El león, la bruja y el ropero -por 4 dólares, y otro de voluntariado internacional en tierra firme, que consiste en donar libros y proveer de sistemas portátiles para la purificación del agua.
Grebe, quien dio la bienvenida, se mostró entusiasmado de su llegada al país. Se calzó un sombrero Panamá, para luego confesar que, más allá de la maravilla del Canal, la imagen del atleta ganador de la medalla de Oro en los Juegos Olímpicos de Pekín le resultaba la más cercana a sus recuerdos. “Si alguien lo conoce, dígale que está invitado a venir”, dijo, seguro de que su mensaje llegaría al colonense Irving Saladino.
Logos Hope permanecerá abierto al público de martes a sábado de 10:00 a.m. a 9:00 p.m. y los domingos desde las 2:00 p.m. La entrada tiene un valor de 2 dólares. También disponen de transporte privado, desde la Terminal Nacional de Transporte hasta el muelle en Cocolí, por 1 dólar con 50 centésimos. El bus se toma en la salida del pasillo del dinosaurio en Albrook Mall.
Curiosidades
Hay tripulantes de Filipinas, Antigua y Barbuda, México, Alemania, Malasia, Brasil, China, Jamaica e Indonesia.
El programa acepta a familias. Su capitán, Dirk Colenbrander, de Holanda, viaja con su esposa y dos hijas pequeñas en el barco.
La librería mide 125 metros de largo por 34 metros de ancho.
Entrada es libre a niños hasta 12 años y adultos mayores de 65 años.
Las formas de pago son en efectivo o con tarjeta Visa o Mastercard.
Los lunes el barco permanece cerrado al público.
El 15 de agosto, de 1:00p.m. a 6:00p.m. la entrada al buque será libre.
