Algunos médicos reportan un nuevo beneficio de las cirugías para bajar de peso: la prevención de la diabetes. Menos personas obesas operadas para reducirles el estómago desarrollaron esta enfermedad, en comparación con quienes recibieron el tratamiento habitual para bajar de peso, según un amplio estudio realizado en Suecia.
Los resultados, publicados el jueves en la revista médica New England Journal of Medicine, renovaron el debate sobre cuándo deben ofrecerse tratamientos drásticos a las personas obesas, como bandas gástricas ajustables y otros procedimientos de cirugía bariátrica.
La idea de que el operar puede prevenir la diabetes es “provocativa y emocionante”, pero es “impráctico e injustificado” pensar en realizar cirugías bariátricas a millones de adultos obesos, escribió el doctor Danny Jacobs, un cirujano de la Universidad de Duke, en un comentario en la revista.
El doctor Mitchell Roslin, jefe de cirugía bariátrica en el hospital Lenox Hill en Nueva York y quien asesora a algunos fabricantes de equipos para estas operaciones, no estuvo de acuerdo.
“Si la cirugía es el único tratamiento que tenemos, tenemos que aceptar sus consecuencias financieras” y renunciar a “la noción ingenua” de que las personas con obesidad severa solo tienen la salida de aprender cómo bajar de peso, dijo Roslin.
Millones de estadounidenses padecen diabetes tipo 2 provocada por la obesidad.
A principios de año, dos estudios mostraron que la cirugía bariátrica puede revertir la diabetes y mantenerla a raya durante muchos años, posiblemente para siempre.
El nuevo estudio fue un paso más allá, al indicar que en primer lugar podría prevenir la diabetes entre las personas obesas.
Los investigadores dieron seguimiento a 1 mil 658 pacientes que se sometieron a cirugía bariátrica, y estimaron que la operación quirúrgica redujo las probabilidades de desarrollar diabetes en un 78%.
