El presidente del Consejo Mundial del Agua (WWC), el brasileño Benedito Braga, instó a conciliar intereses y a reforzar los marcos regulatorios para garantizar que las inversiones privadas en proyectos hídricos no choquen con la preservación del ambiente ni con las comunidades.
Ciertas inversiones “pueden exacerbar problemas y amenazar el sustento de millones” de personas, por lo que se requiere contar con “instituciones públicas sólidas para regular el uso del agua en una cuenca”, dijo.
Una “buena gobernanza minimiza los conflictos”, subrayó el responsable, que se hallaba en Sao Paulo.
El WWC, con sede en Marsella (Francia), reúne organizaciones multilaterales, oenegés, gobiernos, entidades privadas, académicos y asociaciones de usuarios. Su principal meta es alcanzar el Objetivo de Desarrollo Sostenible 6 (ODS6) fijado por la ONU, que busca garantizar el acceso al agua y al saneamiento a toda la población mundial en 2030.
“El sector privado, a la vanguardia del desarrollo de nuevas tecnologías para un mejor manejo del agua (...), debe vincularse con otros actores y autoridades para asegurar que todos trabajan con los mismos objetivos de seguridad hídrica”, apunta.
Para alcanzar las metas del ODS6 “se necesita unos 650 mil millones de dólares de inversión anual de aquí a 2030, solo para asegurar la infraestructura necesaria”, estimó el funcionario.
