Paraguas para el sol o la lluvia, zapatos cómodos, ropa fresca y hasta una silla plegable.
Estos son algunos de los accesorios que tienen en mente aquellos que les gusta disfrutar en directo de los desfiles patrios. Pero en medio del jolgorio patriótico algunos olvidan un punto vital en su lista de prioridades: los alimentos que consumirán mientras están fuera de casa.
Es tradición que para estas fechas se extienda más de un puesto de venta de comida en las áreas de los desfiles.
Este año se han otorgado cerca de 60 permisos para puestos fijos y otros 70 puestos ambulantes, de acuerdo con datos de la Alcaldía de Panamá.
Frente a este panorama, los nutricionistas aconsejan tener cuidado con lo que vaya a ingerir en los puestos de comida, pues una decisión equivocada puede llevarlo a serios quebrantos de salud.
Durante épocas festivas hay la posibilidad de consumir alimentos de procedencia dudosa y cuya preparación no siempre es la mejor, advierte la doctora Enitza George, médica especialista en medicina familiar y programas de bienestar.
El primer consejo de la especialista, aunque quizás es difícil de cumplir, es evitar comer en puestos improvisados. Lo mejor sería, indica, comer en un establecimiento de comida rápida (si lo que desea es una atención pronta) o comer antes de salir de casa.
Las personas se acostumbran a consumir estos bocados no inocuos por falta de conocimiento y en busca de algo inmediato que llevarse al estómago, indica, por su lado, la nutricionista Xalteva Zúñiga, quien colabora en el Patronato de Nutrición.
La opción más factible para evitar la compra de alimentos durante los desfiles, ferias y lugares públicos es llevar en su bolsa o mochila galletas de soda, sal, queso, avena, maní y jugos con néctar, menciona.
Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, se han descrito más de 250 enfermedades diferentes transmitidas por alimentos procesados de forma equivocada. Por eso preste atención a ciertas señales que le salvarán de un mal rato.
