A Juliette Binoche nunca le bastaron las medias tintas. En lo laboral, la atractiva actriz de mirada dulce es una perfeccionista, y en lo personal, busca su ideal del amor.
El domingo “la Binoche” cumple 50 años, soltera y con un rosario de premios. En 1998, la actriz dio el salto internacional con su papel en La insoportable levedad del ser, y nueve años más tarde llegó su coronación con el Oscar como mejor secundaria por El paciente inglés.
Aquel papel de enfermera franco-canadiense en un abandonado monasterio le valió además el Oso de Plata en la Berlinale. Además, se llevó el César por Tres colores: Azul, la Palma de Cannes por Copie conforme y tres Premios del Cine Europeo.
A esta imponente lista ha contribuido su esfuerzo por encarnar a personajes complejos y traspasar los límites. Con más de 45 éxitos de taquilla y experimentos cinematográficos, Binoche está considerada una de las grandes del cine francés.
