Largas jornadas laborales y el agotamiento físico pueden ser algunos de los factores que no permiten que las personas preparen en casa sus almuerzos para llevar al trabajo. No obstante, a consideración de los expertos esta sería una alternativa más saludable y menos costosa que comprar alimentos en restaurantes y cafeterías.
Comer sano no es sinónimo de alimentarse con hojas y puros vegetales, es más que nada cuidar la preparación de los alimentos y el tamaño de las porciones, recuerda el chef Alejandro Díaz.
Estos platillos deben contener carbohidratos, proteínas, vitaminas y minerales o grasas, resalta la nutricionista costarricense Ana Cristina Gutiérrez.
La lista de comidas sencillas que se pueden preparar en casa es extensa y no deben basarse solo en emparedados para salir del paso, subraya el chef Mauricio Santos.
Por ejemplo, pueden llevar un filete de pechuga de pollo a la plancha con ensalada de lechuga, tomate y pepino, sugiere Zaida Ríos, directora chef de Comidas Gourmet PTY.
Otra opción sería una taza y media de espagueti integral con vegetales como pimentón, cebolla, hongos, berenjena, queso parmesano y aceite de oliva.
También puede ser una papa cocida con 3.5 onzas de filete de corvina a la plancha y brócoli al vapor.
Por otro lado, los consultados reiteran que comer saludable no es caro, y por ende no debe ser una excusa, pues si compara lo que se gastan en comida no saludable y comprar en el supermercado, al final es lo mismo, considera Ríos.
“Cuando no estamos a dieta compramos galletas, cereales, cervezas y sodas, es decir que no tenemos control. Comemos en restaurantes y a la larga se gasta igual o más”, comenta.
Si desea conocer otras opciones de almuerzos para la oficina que sean beneficiosos para su salud, además de saber qué meriendas llevar, avance a página
